Barcelona
Mas exige más traspasos aunque la Generalitat apenas llega a fin de mes
Artur Mas se está guiando por una doble lógica en sus primeros pasos como presidente de la Generalitat. Por una parte, planea elevar el techo del autogobierno catalán exigiendo al Gobierno que haga efectivos los 27 traspasos pendientes que prevé el Estatut y, por otra, es capaz de viajar en clase turista por ahorrar unos cuantos euros a las maltrechas finanzas de la Generalitat.
Es decir, que Mas desea aumentar las competencias de la administración catalana a pesar de que la Generalitat está en pleno proceso de recortar gastos.
¿Pero hasta qué punto es delicada la situación económica de la Generalitat? Pues según el portavoz parlamentario de CiU, Oriol Pujol, hasta el extremo de que «prácticamente no se pueden ni pagar las nóminas de la Generalitat», dijo ayer en Com Ràdio. Pujol disparó de esta manera las alertas en Cataluña, ya que, hasta ahora, no se temía por las pagas de los funcionarios catalanes. Horas más tarde, el portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, intentó disminuir el desasosiego afirmando que «no hace falta» que los trabajadores públicos «se preocupen».
Las afirmaciones de los dirigentes nacionalistas desataron las críticas de la oposición. Según el portavoz parlamentario del PP catalán, Enric Millo, la Generalitat busca «culpar de todo» a Madrid. Reclamó, en todo caso, que el Gobierno aporte cifras reales y no cree una «confusión grave». Desde el PSC, Laia Bonet censuró «el alarmismo» de Oriol Pujol.
Hasta el momento, el Gobierno de Mas ha tomado varias iniciativas para estabilizar la situación financiera de la Generalitat. Comenzó recortando el «aparato político» de la administración y siguió anunciando un recorte de los Presupuestos del 10 por ciento. Todo para reducir una deuda que asciende a 40.607 millones de euros que, entre otras cosas, arrastra un déficit de 7.000 millones correspondientes al pasado ejercicio de 2010.
Dentro de dos meses, la Generalitat tendrá listo un informe con el que quiere cuantificar los gastos que ha tenido que asumir forzada por iniciativas del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero como la Ley de dependencia. Así quiere resarcirse de una parte de sus desembolsos.
La situación económica de la Generalitat será el tema estrella de la reunión que Mas y Zapatero mantendrán el lunes, aunque el presidente catalán también quiere poner sobre la mesa traspasos pendientes como el de las becas.
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