Griñán insta a Viera a lograr una lista por Sevilla o «será su problema»

SEVILLa- Las prisas no son buenas. La rapidez con la que el PSOE ha pretendido zanjar su crisis interna, convocando el 38 Congreso Federal a principios de febrero, ha dejado al descubierto en Andalucía los verdaderos juegos de tronos que existen en el partido. Las guerras de guerrillas se materializaron en Sevilla en la Ejecutiva que se celebró el lunes en la que el secretario provincial, José Antonio Viera, dejó claro a su teórica aliada y secretaria de Organización de los socialistas andaluces, Susana Díaz, quien mandaba a la hora de confeccionar la lista de delegados que puedan votar por Alfredo Pérez Rubalcaba o Carme Chacón, si no hay sorpresas.

El acuerdo no será fácil. Fuentes socialistas apuntan a que, entre otras fricciones, Viera apoyaría a Rubalcaba y Díaz apostaría por Chacón, por lo que podría ocurrir que no hubiese una única lista por Sevilla. Una cuestión con segunda lectura, por cuanto el secretario general del PSOE-A, José Antonio Griñán, irá de delegado al Congreso por esta provincia y podría darse la circunstancia de que éste no encabezara ninguna de las dos, al no lograr el consenso, y no acudiera al cónclave de febrero en calidad de delegado. Opción que conllevaría que perdiera su voto.

El propio Griñán lanzó ayer un contundente mensaje a Viera: la «responsabilidad» del secretario general del PSOE de Sevilla «es buscar el consenso». Y añadió: «Si no lo hace será su problema». Insistió en que el socialista sevillano tiene la «obligación» de buscar el pacto para elaborar la lista de delegados que acudirán al 38 Congreso, junto a la mayoría del partido que, según dijo el también presidente andaluz,«además sabe cuál es porque la tiene sentada en su Ejecutiva», deslizó.

El secretario de los socialistas autonómicos instó a los militantes y a los órganos de dirección de su formación a trabajar por aunar voluntades de cara al cónclave de febrero en el que se elegirá al próximo secretario general del PSOE. Aunque, tal vez para quitarse presión, aseveró que él dedica el 99 por ciento de su tiempo a ser presidente de la Junta y, por ello, no puede «tender» ni tener «tiempo» para el Congreso Federal.

Pese a la advertencia de Griñán, o tal vez por ella, la dirección del PSOE en Sevilla quiso dejar claro por la tarde su respaldo a Viera y anunció que propondrá que la relación de delegados sea encabezada por el propio presidente de la Junta y por Viera, «además de miembros de las ejecutivas federal, regional y provincial». Confían en lograr una única lista que «represente a todas las sensibilidades presentes en nuestra organización». Habrá que ver si las disonancias del pasado lunes fueron sólo puntual o la distancia entre Viera y Díaz, quien lo ha defendido incluso en el escándalo de los ERE, se acrecientan.

En otras provincias como Cádiz –donde la alcaldesa de Sanlúcar, Irene García, encabezará una lista que se enfrentará a la del secretario provincial, Francisco González Cabaña– o Málaga –en la que también existen discrepancias–, el proceso de designación de delegados ha puesto al descubierto tensiones que no desaparecerán, al estar ligadas al control del partido tras las elecciones autonómicas. Y es que, dentro del PSOE hay quien lo tiene claro: «Las probabilidades de que gobernemos en Andalucía son pocas, sobre todo si entra en juego UPyD o Equo».

Sánchez Gordillo prefiere el acta de diputado al cargo de alcalde
El parlamentario de IULV-CA por Sevilla, Juan Manuel Sánchez Gordillo, despejó ayer cualquier duda que pudiera existir: renunciaría a la Alcaldía de la localidad sevillana de Marinaleda, que ocupa desde las primeras elecciones democráticas de 1979, si es elegido diputado en el Parlamento de Andalucía en los comicios autonómicos del 25 de marzo.

Su aclaración fue una respuesta al coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, quien aseguró que exigirá a los alcaldes que puedan ir en las listas a la Cámara regional que anuncien públicamente que renunciarían a la Alcaldía, en el caso de ser elegidos diputados.

No obstante, el también líder del CUT-BAI volvió a mostrar su desacuerdo con la normativa aprobada por el Parlamento en relación a la incompatibilidad entre los cargos de diputado andaluz y alcalde. De hecho, dio orden a su abogado de recurrirla.