Cientos de conductores caen en la trampa de los billetes falsos

Los diez carriles de una de las autopistas de entrada y salida a Moscú no fueron suficientes para absorber el atasco de tráfico organizado por un puñado de conductores que se bajaron de sus coches en busca de unos billetes que unos desconocidos habían arrojado sobre el asfalto.

A simple vista, parecía dinero real que estaba esparcido por el firme de la carretera. Los billetes aparentaban ser de 1.000 rublos (en torno a 25 euros) y había una buena cantidad de ellos. Sin embargo, cuando los conductores los miraban con detenimiento, comprobaban que eran de mentira. Según algunas fuentes, se trataba de marcadores de página que imitaban billetes.

Al parecer, se trataba sólo de una broma de mal gusto que demostró qué esta dispuesto a hacer el ciudadano de la calle para conseguir un dinero "caído del cielo". Por si acaso, las autoridades municipales enviaron al lugar a varias dotaciones de bomberos para que regaran e inutilizaran los billetes, evitando de esta forma tentaciones entre posteriores conductores.

En cualquier caso, los moscovitas tenían motivos suficientes para confiar en su buena fortuna, ya que el pasado verano se produjo una lluvia de dinero similar en una autopista, aunque esta vez con dinero de verdad, cuando dos funcionarios perseguidos por la Policía comenzaron a lanzar 350.000 dólares que supuestamente habían conseguido gracias a sobornos.