Ciencias naturales

Los temblores de El Hierro se contagian al resto de las Canarias

Los científicos alertan sobre una nueva erupción al norte de la isla 

Los temblores de El Hierro se contagian al resto de las Canarias
Los temblores de El Hierro se contagian al resto de las Canariaslarazon

Si algo tienen claro los científicos que trabajan en El Hierro es que se puede esperar de todo. «De lo único que estamos seguros es de los temblores. La tierra no deja de moverse», explica uno de los expertos. Ayer se registró el seísmo más intenso desde el comienzo de la actividad volcánica en el Mar de Calmas. Alcanzó el 4,6 en la escala Richter y se sintió en las islas vecinas de Tenerife y La Palma. El 112 recibió 29 llamadas relacionadas con los movimientos del terreno. El tremor que surgió hace más de un mes y que atemoriza a los herreños mantiene su actividad. Su señal la registra el Instituto Geográfico Nacional (IGN) y, como explican, se incrementa y disminuye sin una pauta lineal.

No obstante, lo que más preocupa a los investigadores que trabajan en la zona es la posibilidad de una segunda erupción al norte de la isla, en el Golfo. Una de las responsables del comité del IGN que trabaja en la isla confirmó ayer la tesis tras calificar de «centro emisor» esta parte de El Hierro. La hipótesis parte de los registros del buque Ramón Margalef, del Instituto Español de Oceanografía (IEO) que confirman la existencia de salidas de gases al norte.

Pero, como analizan los expertos, se desconoce el momento en el que estas emisiones han comenzado a producirse. Aún así, el descubrimiento de la embarcación ha puesto en alerta a la dirección del Pevolca (Plan de Protección Civil por Riesgo Volcánico) que trata de analizar las consecuencias de otra erupción. Este descubrimiento ha obligado a vulcanólogos y geólogos a barajar una segunda tesis: la posibilidad de que estos gases comiencen a salir en tierra firme. «No se debe descartar que una nueva erupción se produzca en tierra firme.

Lo más difícil sería descubrir dónde y cuándo porque lo más seguro es identificarlo por el olor a azufre», añade el experto. Mientras los científicos tratan de descifrar las características del volcán, los herreños viven con temor. Es probable que también se evacúen las poblaciones del norte de la isla y que los desprendimientos se mantengan. La localidad de La Frontera está siendo una de las más perjudicadas por los seismos. «Llevamos soportando entre 4.000 y 5.000 movimientos sísmicos con epicentro en la zona y que han desencadenado el deterioro de la zona», alertaba ayer su alcalde, David Cabrera de León.