El Consell defiende Bancaja de los ataques que criminalizan su gestión

VALENCIA- La situación de Bancaja antes de que se fusionase con Caja Madrid no era idílica, pero la de su socia madrileña no era mucho mejor. El vicepresidente del Consell, José Císcar no dudó ayer en defender a la caja valenciana de todos aquellos que se han empeñado en criminalizarla y ponerla como única responsable de la grave situación que ha llevado a Bankia a la intervención.
Las críticas, además, venían de un diputado popular, Vicente Martínez Pujalte, que aseguró que su expresidente, Rodrigo Rato, heredó una situación «envenenada». Císcar aseguró que la cartera de créditos problemática era del doce por ciento en ambas entidades, que el peso de los activos inmobiliarios era del 23 por ciento en Bancaja y del 20 en Caja Madrid y que el ratio de eficiencia de la caja valenciana era once puntos superior.
También salió en defensa de sus consejeros. «La responsabilidad es de muchos y no sólo de unos pocos», entre los que citó al Banco de España y al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB). «Alguien no está diciendo la verdad», insistió.
El vicepresidente no tuvo más remedio que referirse a los continuos rumores de intervención que apuntan hacia la Comunitat Valenciana. Se mostró convencido de que el Consejo de Política Fiscal y Financiera aprobará el plan de reequilibrio económico de la Generalitat, aunque no sabe si lo hará con algún tipo de corrección. En cualquier caso, insistió en que de momento, el Ministerio de Hacienda no ha realizado ninguna comunicación.
La Generalitat presentó al Gobierno hace dos semanas el plan de reequilibrio para los años 2012, 2013 y 2014, con el que se garantiza que se cumplirá el déficit del 1,5 por ciento. El ajuste anual asciende a 2.260 millones e incluye medidas como reducciones a los funcionarios en sus complementos por carrera profesional o la privatización de la gestión de los hospitales.
El pleno del Consell aprobó el borrador del proyecto de decreto por el que se creará un sistema que acreditará los títulos en lenguas extranjeras otorgados por distintas entidades académicas en la Comunitat.
Por el momento se acreditarán los títulos en inglés, francés, alemán e italiano, aunque el objetivo es ampliar el número de idiomas en el futuro.