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La Eurocámara rechaza la suspensión de Schengen que pide Sarkozy

La mayoría de los grupos de la Eurocámara, a excepción del Partido Popular Europeo (PPE) y los grupos euroescépticos minoritarios, rechazaron hoy los planes anunciados por el presidente francés Nicolas Sarkozy de suspender el tratado de Schengen, si no se reforman para contener la inmigración.

Los planes del candidato conservador a la reelección sobre el cierre de fronteras han restado protagonismo a la economía en el debate de esta mañana en el pleno de la Eurocámara.

El eurodiputado español Enrique Guerrero (PSOE) ha lamentado que en el debate ni el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ni el del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, hicieran referencia a la propuesta que hizo Sarkozy el pasado domingo en un mitin electoral.

En alusión al presidente de Francia, Guerrero ha señalado que "hay líderes que cuando tienen elecciones lanzan sus atemorizadas proclamas a la opinión pública nacional".

"La ciudadanía europea retrocede con propuestas como la de Sarkozy", ha afirmado Guerredo, quien ha añadido que "eso no es liderazgo político, sino populismo y oportunismo".

En la misma línea, el líder de los socialistas y demócratas (S&D), Hannes Swoboda, ha pedido al presidente francés que no sea "antieuropeo ni nacionalista".

Swoboda ha preguntado a Sarkozy si a partir de ahora los eurodiputados deberán usar su pasaporte para acudir las sesiones plenarias en la sede del PE de Estrasburgo (Francia).

El líder de los liberales (ALDE), Guy Verhofstadt, se ha preguntado ante el pleno "¿Cuál es líder francés de la extrema derecha (Jean Marie) Le Pen o (Nicolas) Sarkozy?".

El copresidente de los Verdes, Daniel Cohn-Bendit, ha dicho que si la frontera de Grecia con Turquía es una vía de entrada de la inmigración ilegal es "por culpa de la UE".

Según el político ecologista, "Turquía ha sido vapuleada por la UE y encima se le pide que se ponga orden".

A favor de los planes de Sarkozy se ha mostrado, entre otros, el eurodiputado francés del ultraderechista Frente Nacional (FN) Bruno Gollnish, quien ha dicho que "los franceses tienen derecho a comer todo tipo de carne y por ello no son racistas".