Un policía británico coleccionó ilegalmente 649 huevos de aves salvajes

Michael Upson, de 52 años, se declaró culpable, durante un proceso celebrado en Norwich (este de Inglaterra), de poseer dichos huevos, algunos de ellos de especies protegidas como la totovía, el ruiseñor bastardo o el aguilucho lagunero.

Upson fue detenido el pasado junio cuando se descubrió en su casa la colección almacenada en cajas de margarina dentro de una maleta rota, aunque inicialmente él aseguró que pertenecían a su difunto padre que los habría recogido en los años cuarenta.

Sin embargo, unas libretas que se encontraron en su casa y donde documentaba con todo detalle cada uno de sus hallazgos demostraron que los huevos habían sido robados de nidos a lo largo de todo el país entre 1991 y 2001.

Además, las anotaciones de Upson evidenciaron que algunos de estos huevos, que él guardaba como trofeos, habían sido recolectados durante sus horas de servicio. El juez dictará mañana la sentencia que tendrá que cumplir el acusado, que se jubiló de su cargo de policía en agosto y que podría enfrentarse a hasta seis meses de prisión.

La mayor parte de los huevos que Upson coleccionó serán destruidos, aunque algunos serán donados a museos.