Rubalcaba vs Chacón: «El Gobierno sí es estable»

La experiencia de tantos años en política le sirvió ayer a Rubalcaba para atrincherarse antes de comenzar la batalla. En su primera comparecencia tras la renuncia de Carme Chacón –el jueves declinó hacer declaraciones–, el vicepresidente primero dejó claro al inicio de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que no hablaría de los asuntos del PSOE porque acudía como portavoz del Ejecutivo. Aunque ante la insistencia de los periodistas, terminó por lanzar el dardo que parecía no querer tirar.
«Cuando un Gobierno tiene proyectos y tiene suficientes apoyos parlamentarios para sacarlos adelante es un Gobierno que tiene estabilidad política», afirmó Rubalcaba no sin cierta ironía. Contestaba así a la ministra de Defensa, que apenas veinticuatro horas antes había renunciado a disputar las primarias del PSOE aduciendo a los «movimientos internos» que, a su juicio, habían amenazado incluso «la estabilidad del Gobierno». Y ahí se detuvo, porque declinó valorar si un Congreso extraordinario del partido desestabilizaría al Ejecutivo lo que obligaría a adelantar las elecciones. Tampoco si se presentará como candidato, algo que el propio Rodríguez Zapatero propuso a sus barones horas más tarde. «No diré nada hasta que decidan los órganos que tienen que decidir», insistió. No en vano, ya tenía más que planificado que le acompañaran las ministras de Medio Ambiente y Sanidad para tirar balones fuera. «Me he hecho flanquear por los lados para evitar cualquier tipo de avasallamiento inquisitivo», bromeó.
Y nadie le sacó de ahí. Si evitó hablar del futuro, también rehuyó referirse al resultado socialista el 22-M. Ni siquiera cuando los periodistas le recordaron su promesa de hablar después de las elecciones. Tras cinco días de silencio, Rubalcaba volvió a remitir los análisis ya realizados por el PSOE, y afirmó sencillamente que el Gobierno los «comparte».