Europa confía en Rajoy

El pacto de futuro para refundar la Unión Europea sobre las bases de una mayor disciplina fiscal y un traspaso de soberanía –en lo que se refiere a los presupuestos a la UE– allana el camino a Mariano Rajoy para poner en marcha sus planes anticrisis. Los acuerdos de Bruselas respaldan las ideas entreveladas por el futuro presidente del Gobierno de España para llevar a cabo los recortes del gasto y las reformas legislativas y fiscales que activarán el empleo y el crecimiento.

Europa respalda la agenda de actuaciones de Mariano Rajoy frente a lo cocinado durante años por el Gobierno socialista. La única excepción ha sido el último año, cuando Rodríguez Zapatero, al dictado de la UE , se vio obligado a imponer duras condiciones para intentar reconducir la situación. Un caos económico que ha provocado cinco millones de parados y un déficit disparado. Y todo porque, ante las primeras señales de crisis, cuando en 2008 estalló Lehman Brothers, Zapatero miró para otro lado. Erró su cálculo y apostó por salir de la situación echando mano de la deuda pública. Se presentó a las elecciones negando la mayor: cerrando los ojos a la crisis y lanzando al Estado y las autonomías a una espiral de gasto público. El fracaso del Plan E a la vista está. En este sentido, si de algo ha valido la reciente cumbre celebrada en Bruselas ha sido para condenar este tipo de actitudes en las que nuestro país se ha dejado, por ejemplo, su viabilidad fiscal.

El Gobierno socialista, como decimos, rectificó, pero ha sido insuficiente. La cantidad y calidad del mal hecho en España es de difícil –pero no imposible– solución. Como ya apuntó Rajoy, el trabajo que espera al PP es ímprobo, pero se puede y debe acometer.
Este próximo martes, cuando se constituyan las Cortes Generales, será el preámbulo de una semana en la que también se conocerá la futura estructura de su Gobierno. Una cuestión de gran relevancia pues será el avance de la previsible reconversión de ministerios en secretarías de Estado o la fusión de aquéllos, todo para ganar en austeridad y en eficiencia.

El desafío económico y social español es de tal calado que aquí –y en el resto de Europa–, esperan resolución al acometer unas reformas inaplazables. Y pedagogía, mucha pedagogía para explicar a los ciudadanos la urgencia y necesidad de estas medidas. Rajoy, que ha llegado a la presidencia del Gobierno con una cómoda mayoría absoluta, se ha reafirmado en toda Europa al anunciar que su primera medida será el desarrollo del principio de estabilidad presupuestaria. Palabras de confianza en España y en Europa. Todo para, con rigor y disciplina, ser creíble ante los mercados. Igual que los españoles pusieron en él su confianza para salir de la crisis y volver a la prosperidad.