Más nervioso que en el Mundial

MADRID- Es tan vergonzoso que mandó al frente de la presentación del «Campus Madrid Vicente del Bosque» a su director técnico, Pedro Ruiz, y él –Vicente del Bosque júnior, padrino, como su padre, y coordinador de la escuela–, se cobijó en las últimas filas.

Vicente Jr. estuvo en Polonia y vio los encuentros con Italia e Irlanda; el de Croacia, no, está de exámenes. «Tengo pensado ir a la final... si llegamos», cuenta.

A su padre le ve nervioso. «Sí, más que en el Mundial»: no por las críticas, sino por la responsabilidad: «Es una persona muy tranquila, pero se le nota nervioso. Parece que no, pero por los gestos deduzco que pasa muchos nervios. No he notado críticas por las decisiones técnicas de mi padre. Ante Croacia, lo importante es que ganamos. Las críticas no le alteran. Sabe que está para eso».

Recuerda que en el Mundial había ilusión por ver qué hacía; ahora, la exigencia al equipo es la del bicampeón: «En Suráfrica estábamos nerviosos y expectantes porque lo habíamos hecho muy bien en la Eurocopa».

La familia Del Bosque habla todos los días con el seleccionador, pero no disecciona los partidos. «No le hablo nunca de fútbol. Lo que él hace, me vale. A otros a lo mejor no, a mí, sí», lo dice con respeto hacia quien no tenga esa seguridad. «Si España juega bien, ganamos fácil a Francia», añade.

La unión y la solidaridad son otras de las virtudes de los Del Bosque. El seleccionador estaba por videoconferencia para apoyar sendos campus quincenales, del 2 al 27 de julio, de fútbol y otras disciplinas deportivas, en los que entre 300 y 400 niños, de entre 6 y 15 años –50 de ellos, con dificultades económicas, becados– contarán con la supervisión del seleccionador nacional y con la colaboración y el apoyo de la Fundación Síndrome de Down.