Valencia

Alonso se desespera

El piloto asturiano se mostró en la conferencia de prensa ciertamente apesadumbrado con el rendimiento de su monoplaza y dejó escapar ligeras críticas hacia Ferrari, aunque no con el tono que empleaba en Renault cuando las cosas no marchaban bien

El español no escondió su decepción por el resultado obtenido
El español no escondió su decepción por el resultado obtenidolarazon

Nada nuevo en Valencia. Ni siquiera las restricciones impuestas por la FIA para perjudicar claramente a Red Bull han servido para cambiar el panorama. Vettel logró la "pole"por delante de su compañero Webber, Hamilton y Alonso, que esta vez sí, a continuación fue muy claro con la situación que vive la escudería Ferrari. Incluso, algunos miembros de su entorno se sorprendían por la claridad con la que se expresaba el asturiano en relación al rendimiento del monoplaza y el equipo.

La conferencia de prensa posterior a la clasificación celebrada en el motorhome de Ferrari no tuvo desperdicio. A pesar de sus intentos, el enfado del asturiano era más que evidente. Reconoció que existía cierta mejora en el rendimiento del monoplaza pero insistió en que todavía estaban lejos de los rivales. Incluso, en una de sus afirmaciones, dijo de forma taxativa: "Yo más no puedo hacer", en relación a las pobres prestaciones del Ferrari 150 Italia, un coche que está muy por debajo de lo esperado.

Sorprendentemente, Alonso comentó en varias ocasiones que había estado delante de su compañero en 8 ocasiones (un dato que poco importa sabiendo que Massa está en un nivel muy inferior al suyo) e incluso, en un momento de su alocución, recordó a la Ferrari de 2004, la que dominaba y ganaba el título poco después de llegar a la mitad del calendario, para compararla con la situación de dominio que vive en la actualidad Red Bull. Sin embargo, dejó entrever que la Ferrari de aquella etapa sí que era un gran equipo. Una vez más, Ferrari ha dejado claro que esta temporada poco o nada puede hacer frente a la superioridad de Red Bull…a pesar de contar en sus filas con uno de los mejores pilotos de la F-1, quizás, el único que no necesita tener el mejor coche para ganar, como ya demostró el pasado año cuando apuró sus opciones en el campeonato hasta el último suspiro con un coche claramente inferior al Red Bull de Vettel y Webber.