El Síndic intenta salvar el recorte del Estatut

BARCELONA- Desde que el Tribunal Constitucional (TC) emitió su fallo por el recurso del PP sobre el Estatut, la Generalitat se ha puesto manos a la obra para intentar salvar el texto. De momento, el Ejecutivo catalán ha arrancado del Gobierno un compromiso para iniciar un proceso de modificación de la Ley orgánica del Consejo General del Poder Judicial y permitir que Cataluña pueda crear su propio consejo de justicia, al margen del estatal, un precepto recortado por el TC.

Más allá de esta vía, el Síndic de Greuges –el Defensor del Pueblo catalán–, Rafael Ribó, reconoció ayer que también se ha puesto manos a la obra para intentar minimizar la sentencia del Alto Tribunal, según explicó en una entrevista concedida a TV3 y Catalunya Ràdio. Por este motivo, está negociando con la Defensora del Pueblo en funciones, María Luisa Cava de Llano, para tratar de recuperar las competencias que ha perdido tras las sentencia del TC.

De todas formas, Ribó reconoció que los contactos mantenidos son «discretos» y que el proceso de negociación se encuentra en una fase inicial, aunque se declaró «optimista». Por este motivo, el Síndic reclamó «voluntad de cooperación» por parte de la Defensora del Pueblo. Para Ribó, ésta es la única posibilidad de alcanzar un acuerdo positivo para sus aspiraciones.

Cabe recordar que las relaciones entre ambas instituciones no pasan por su mejor momento. El ex Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, interpuso un recurso en el TC contra el Estatut y otro contra la Ley del Síndic de Greuges. Múgica no veía con buenos ojos que el Síndic de Greuges tuviera competencia exclusiva en Cataluña en todo lo que se refieren a las tareas de Defensor del Pueblo. Sin embargo, para Ribó el único problema que tenía el ex Defensor era una «fijación con las leyes catalanas». Ribó recordó que de los cinco recursos de inconstiucionalidad interpuesto por el Defensor en los dos últimos años, tres se refieren a leyes catalanas. No en vano, al Estatut y la Ley del Síndic debe añadirse la Ley de acogida de inmigrantes.

Pese a la tensión existente entre ambas instituciones, Ribó hizo una «llamada de atención» a la actual Defensora ante «la oportunidad» que ambos organismos tienen para «poner racionalidad, serenidad y pedagogía» en el desarrollo del autogobierno de Cataluña.

Defensa de la Ley de acogida
El Síndic quiere mejorar las relaciones con la Defensora del Pueblo, pero María Luisa Cava de Llano no se salvó de sus críticas por haber recurrido la Ley de acogida. Para Ribó, este recurso es «irresponsable» porque toca algo que «ha dado muy buenos resultados en Cataluña, el régimen lingüístico». La consellera de Acció Social se sumó a las críticas y acusó a la Defensora de querer «ganar notoriedad» para «perpetuarse en el cargo».