Las rebajas de Letizia

L a economía aprieta para todos. Parece que nadie se salva: ni «celebrities», ni aristócratas, ni adinerados... Ni princesas. Mientras Carmen Lomana monta un mercadillo con su ropa en desuso, Kate Middleton se vuelve adicta a Zara y Eva Longoria desgasta su tarjeta de crédito en las tiendas «low cost» españolas, la Princesa Letizia no lo duda y se pasea en plenas rebajas por el madrileño barrio de Argüelles. La esposa de Don Felipe decidió hacer las cosas por sí misma y empleó una tarde en realizar compras navideñas.

Perfectamente camuflada con sus gafas de sol preferidas (las RayBan Aviator), un abrigo de plumas tres cuartos en gris marengo y unos pitillo del mismo tono, un fular lila y el pelo semirrecogido, la Princesa de Asturias paseó por las céntricas calles de Madrid. A pesar de que llevaba escolta, los guardaespaldas se mantuvieron a una distancia prudencial, por lo que pasó inadvertida.

Lejos de decantarse por las casas de lujo que arraigan sus cimiento en la «milla de oro», Doña Letizia eligió tiendas alejadas de las grandes firmas y con carteles de descuentos. Además de Massimo Dutti y Mango –donde las rebajas llegan hasta el 70 por ciento en algunos artículos–, la Princesa paseó sus botines por otras tiendas aledañas y aprovechó las ofertas del momento.

Y es que aunque el diseñador fetiche de la nuera del Rey es el aclamado Felipe Varela, Doña Letizia no tiene ningún problema en vestirse de marcas «populares». De esta forma, aprovecha para promocionar también la moda española, un objetivo con el que está muy comprometida.

Un estilo al alcance de todas
En numerosas ocasiones ha lucido prendas asequibles para un bolsillo medio que a las pocas horas estaban agotadas en las tiendas. Sin ir más lejos, este verano ha dado muestras de que a ella no se le caen los anillos por vestir producto nacional: en agosto, en la cena del Club Náutico por el 30º aniversario de la Copa del Rey de vela, no dudó en aparecer con un juvenil vestido verde con aplicaciones de «pailettes» de Hoss Intropia que rondaba los 350 euros, y para acudir al concierto de Jaume Anglada, compañero de tripulación del Príncipe, escogió una camiseta con bolsillos en colores flúor de la línea «U» de Adolfo Domínguez de 39 euros. El diseñador gallego es, después de Varela, Caprile o Ailanto, uno de los preferidos de la Princesa, quien no dudó en acudir a la tienda de cuatro plantas que la firma tiene en el Barrio de Salamanca cuando se enteró de que Domínguez no podría ir a Cibeles por la crisis. Allí se compró un bolso, un pantalón y un vestido blanco, prenda que adora.

Otras veces se la ha podido ver con vestidos de Mango, blusas de Massimo Dutti –como aquella con estrellas que lució en octubre en Valladolid y que a las pocas horas estaba agotada en la mayoría de los establecimientos–, bolsos de Bimba&Lola o túnicas de Zara de 39,95 euros. Todas son prendas que pueden ser encontradas hoy, día en el que empiezan las rebajas oficialmente en España, con descuentos de hasta el 50 por ciento.

Muchas serán las que se lanzarán a las tiendas buscando imitar el estilo de una de las «trendsetters» más importantes de España. Sus vestidos cortos de manga larga y cuello a la caja, sus trajes de chaqueta o sus blusas clásicas son prendas fetiche para las «fashionistas» seguidoras del estilo monárquico.

Iconos «fashion»
Y si Doña Letizia diversifica a la hora de elegir su propio fondo de armario, también lo hace cuando elige el de las pequeñas Infantas. Acostumbra a escoger para ellas prendas de estilo romántico en tonos tierra o pastel, con motivos florales y de corte clásico. Sus vestidos, rebecas, merceditas y camisas son también objeto de deseo para muchas madres que quieren ver a sus hijas emulando a Leonor y Sofía. Los lazos que ambas lucen, de la firma asturiana Alice&Bows, se han hecho famosos y a sus tiendas se desplazan madres de toda España.

Doña Letizia tampoco duda en acudir a las marcas populares para ataviar a las Infantas. Muchas veces las viste de Kiddy's Class, Neck&Neck, Nanos o Ikks, cuyas prendas también están rebajadas desde hoy hasta el 28 de febrero, con descuentos de hasta el setenta por ciento.

Y es que los miembros de las casas reales siempre han estado en el punto de mira por sus atuendos y han sido el blanco tanto de críticas como de halagos. Desde Mónaco –con Carolina, Estefanía, los jóvenes Carlota y Andrea Casiraghi y ahora Alberto y Charlene–, hasta Suecia, Holanda o Bélgica, pasando por Inglaterra, donde cada paso de la Duquesa de Cambridge y de su hermana Pippa es puesto a examen, y Dinamarca, cuyos ciudadanos adoran a Mary Donaldson.

Y España no iba a ser menos. Las prendas de Doña Letizia, su peinado, su maquillaje, sus famosos tacones, sus bolsos... Todo es minuciosamente analizado y copiado. Y es que a la Princesa se la ha llegado a comparar con Rania de Jordania, un icono de belleza y elegancia. Pero ni ella, ni Carla Bruni ni Michelle Obama pueden desbancar a la embajadora española del perfecto estilo.

El detalle
Lo más buscado en Reino Unido
 Aunque normalmente causa furor con su original forma de vestir, los pendientes dorados que Kate Middleton lució el día de Navidad –firmados por Kiki McDonough, quien diseñaba joyas para Diana de Gales– se han convertido en el «must have» indiscutible de la temporada.