La oposición pide responsabilidades al Ayuntamiento

Crespones negros anunciaban ayer a la entrada del parque de atracciones del Tibidabo la tragedia del día anterior. La conocida como «Montaña mágica» cerró sus puertas en señal de luto. Aunque varios turistas o ciudadanos despistados se acercaron para gozar de un día en el parque, deberán esperar hasta el miércoles, cuando se vuelva a abrir el recinto al público. Mientras, a diferencia de todos los veranos, el parque presenta una aspecto triste, vacío, a excepción de los investigadores judiciales que recopilan pruebas para tratar de averiguar lo sucedido.«Hemos de ver qué hay detrás de todo esto que es inexplicable». Con estas palabras, la propia presidenta de la empresa del Parque de Atracciones del Tibidabo S.A. (Patsa), Sara Jaurrieta, veía inexplicable cómo había sucedido la tragedia teniendo en cuenta «el control exahustivo de seguridad que se tiene de las intalaciones». Jaurrieta recalcó que la prioridad de la empresa explotadora del parque, que depende de la empresa municipal Barcelona Servicios Municipales, es la seguridad. «A pesar de la crisis este apartado no ha variado en los presupuestos de esta sociedad», dijo Jaurrieta.Sin embargo, con todos los interrogantes abiertos, el Ayuntamiento, que compró el parque de atracciones en 2002, será el que deberá dar explicaciones de lo sucedido. El grupo municipal popular en el Consistorio, liderado por Alberto Fernández Diaz, fue el primero en reaccionar ayer tras el suceso solicitando que se asuman responsabilidades.Fernández pidió una auditoría técnica sobre seguridad y mantenimiento del recinto y que, «una vez se esclarezcan los hechos, se asuman responsabilidades». «Un accidente siempre puede ocurrir pero debería haber sido imposible por las medidas de seguridad y por las inspeciones que cabe exigir a una instalación municipal», dijo desde la escuela de verano del PP, celebrada en Sitges, donde expresó su apoyo y solidaridad a los afectados.Por su parte, el portavoz del grupo municipal de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, Joaquim Forn, anunció que su formación exigirá explicaciones sobre las causas del accidente del Tibidabo y el motivo por el que se permitió que la atracción siguiera funcionando pese a que se oían ruidos extraños.También, el ministro de Fomento, José Blanco, indicó que en la investigación de las causas, «que está en el ámbito de las competencias del Gobierno de Cataluña», espera «que se actúe con la máxima diligencia para esclarecer todo lo que ha ocurrido».