CDC azuza la independencia como alternativa al pacto fiscal

BARCELONA- En las últimas elecciones autonómicas, hace más de año y medio, Artur Mas admitía que el catalanismo de corte independentista no estaba lo suficientemente maduro como para salir airoso de un supuesto referéndum soberanista. El primer barómetro elaborado por el Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat de la era Mas, a la pregunta de «si mañana se celebrara un referéndum, usted qué haría», el 42,9 por ciento decía que votaría que «sí». Un año después, el porcentaje alcanza un simbólico 51 por ciento, aunque el crecimiento no viene por un cambio identitario, sino que crece alrededor de la soberanía fiscal.
Confiado en que este porcentaje todavía puede crecer, CiU ha apostado todas sus cartas al soberanismo. La alternativa al pacto fiscal, el proyecto estrella de Mas, será la independencia. «El dilema está servido: o hay pacto fiscal o se empieza la vía hacia el estado propio», avisó ayer el secretario de organización de Convergència Democràtica de Cataluña (CDC), Josep Rull.
Convencido de que el agravamiento de la crisis anima a muchos catalanes a apostar por el estado propio como la mejor solución, Convergència se ha aferrado al discurso del agravio. El «sin España, Cataluña sería una de las regiones más ricas de Europa»; «la deslealtad del Gobierno obliga a la Generalitat a hacer recortes», o «si Cataluña recaudara y gestionara sus impuestos, la Generalitat podría enjugar su déficit».
El último barómetro del CEO constató que ocho de cada diez catalanes están a favor del pacto fiscal de Mas, pero el PP no se ha dejado intimidar. Centrado en la batalla contra la crisis financiera, Rajoy avanzó el pasado viernes que no tiene intención de negociar el pacto fiscal. En una entrevista a Efe, Rull le respondió que «no hay pacto fiscal o se empieza la vía hacia el estado propio».
El secretario de organización de CDC admitió que la negociación del pacto fiscal no ha empezado con buen pie, pero confía en un cambio de actitud. El Govern de CiU quiere sentarse a hablar. Considera que hay un margen para el acuerdo que ambas administraciones pueden explorar.
Plan B
Pero si Rajoy da un portazo a sus aspiraciones, CDC tiene un as en la manga. En el último congreso del partido, se aprobó una ponencia política que recoge que «la denegación por parte del Gobierno del pacto fiscal sería la condición necesaria y suficiente para convocar un referéndum de autodeterminación». Paralelamente, el Parlament ultima el polémico proyecto de consultas populares. Aunque hay otra alternativa, convocar unas elecciones con carácter plebiscitario.