Lucha de Endesa en defensa del tritón

A demás de paisajes de infarto, el Pirineo de Huesca esconde una especie única en el mundo. Se trata de una población de Calotriton asper, conocido popularmente como tritón pirenaico, que ha evolucionado de manera distinta a otras variedades de su especie. El descubrimiento, desarrollado por investigadores de la Universidad de Lleida bajo el patrocinio del Programa de Biodiversidad de Endesa, ha dado lugar al libro «Biología del tritón pirenaico en el ibón de Acherito», presentado esta semana.

La singularidad del tritón pirenaico radica en su neotenia, es decir, «no realiza una metamorfosis completa. Son larvas acuáticas las que se reproducen y no los adultos, como en otras subespecies de este mismo taxón. Dicho de otra manera, prescinden de la fase terrestre (adultos) y completan el ciclo con larvas acuáticas que procrean. Este fenómeno se da en otras zonas con otros animales, pero en esta especie sólo ocurre en el Pirineo», afirma Delfí Sanuy, catedrático de Biología Animal de la Universidad de Lleida y coautor del libro.

Los científicos creen que el aislamiento reproductor de estos tritones puede deberse a distintos comportamientos de apareamiento entre ejemplares de lago y los del torrente. Si se demuestra, se plantearía un caso de principio de especialización ecológica, un fenómeno evolutivo sumamente raro en la naturaleza que incrementaría aún más el interés de conservación de esta especie. «Esto se debe a que esta población no cruza sus genes con otras poblaciones de la misma especie debido a un aislamiento geográfico y también a que quizás, a falta de confirmación con más estudios, presentan un comportamiento reproductor diferente, con algunas modificaciones morfológicas ya constatadas en la cola de algunos machos, que dificulta, si no impide, la cópula con otras poblaciones diferentes», explica Sanuy.

La excepcionalidad del tritón pirenaica implica preservar su hábitat, ya que son muy sensibles a las alteraciones humanas y, en particular, a las invasiones biológicas. En este sentido, los expertos alertan de que la introducción de peces para la pesca deportiva supondría una pérdida irreversible para la especie. Y es que, aunque aparentemente existan numerosos cursos de aguas que podrían ser ocupados por el tritón, el hábitat potencial disponible se reduce a los afloramientos calcáreos. Entre las medidas propuestas por los especialistas para asegurar la protección del tritón pirenaico destacan «regular el acceso, evitar la captura, que de hecho ya está prohibida, aumentar el control y la vigilancia sobre malas prácticas y conductas incívicas (baño, limpieza de utensilios de montaña), evitar el contacto con el agua para minimizar posibles enfermedades emergentes y muy particularmente evitar la introducción de peces o de cualquier otra especie alóctona», enumera Sanuy.

Dos vías de ayuda
En esta protección de la zona juega un papel clave la eléctrica Endesa. «Sin su ayuda, así como la colaboración del Gobierno de Aragón, difícilmente habríamos logrado los resultados obtenidos», reconoce el catedrático de la Universidad de Lleida. En concreto, Endesa ha colaborado en el proyecto a través de dos vías. «La primera de ellas, acogiendo la propuesta inicial y aceptando el patrocinio de la iniciativa en el marco del Programa para la Conservación de la Biodiversidad de la compañía. Y en segundo lugar, Endesa ha participado con personal propio en una parte de los trabajos de investigación llevados a cabo», asegura Antoni Palau, gerente de Medio Ambiente en Centrales Hidráulicas de la Dirección de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible de la eléctrica.

Son varios los motivos que han guiado la participación de Endesa en este proyecto. «Por un lado está el interés incuestionable del tema en términos de conservación de la biodiversidad y la solvencia científica de los investigadores. Pero no es menos relevante la dilatada relación que Endesa, a través de los saltos hidroeléctricos, mantiene con los medios acuáticos que forman parte del hábitat físico de esta especie, como son los ibones y pequeños lagos de alta montaña», confirma Palau.