FGV reduce a menos del cinco por ciento los viajeros sin billete

Las medidas puestas en marcha desde noviembre de 2009 para evitar la picaresca de aquellos viajeros que acceden al metro o al tranvía sin billete, incluidas en la campaña contra el fraude de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), han conseguido reducir hasta el 4,64 por ciento el índice de fraude.

Las principales medidas puestas en marcha son el mayor control por parte de los inspectores de la red de metro, la instalación del telemando centralizado que ha permitido controlar desde el Puesto de Mando las puertas de acceso a las estaciones, y la campaña de sensibilización «Yo Sí».

La reducción del porcentaje de fraude se ha obtenido del control realizado a 241.464 viajeros durante los primeros meses de 2010. En noviembre de 2009 el índice de fraude se situaba en el 7,42 por ciento.

Anteriormente al desarrollo de la campaña, los índices de fraude ya habían sido reducidos en más de dos puntos en los primeros diez meses de 2009 gracias a la implantación de la tarjeta sin contacto y la fidelización de clientes merced a convenios con entidades públicas y asociaciones. De hecho, el ejercicio de 2008 terminó con un índice de impagos del 9,87 por ciento y, justo cuando comenzaron las actuaciones de FGV contra este delito en noviembre, se situó en el 7,42 por ciento.

El fraude es más elevado en los tramos en superficie, por tanto más en tranvía que en metro, y más en las líneas de metro con mayor recorrido en superficie que las que circulan en subterráneo; donde no hay estaciones con personal de FGV, como los apeaderos; en los vestíbulos secundarios no atendidos; en las estaciones de trasbordo metro-tranvía y en las instalaciones soterradas antes de la hora de cierre.

FGV pretende seguir reduciendo esta cifra y para ello promocionará las tarjetas mensuales y de larga duración, con tarifas de bajo coste mediante convenio. También se promoverá una atención al usuario más cercana y ágil. Se incrementarán expendedoras y canceladoras. Se instalarán líneas de validación en las estaciones abiertas y se modificarán aquellas de los vestíbulos secundarios sin presencia de agentes que son las que registran mayor fraude. Esta modificación impedirá «saltarlas». También se aumentarán las inspecciones en los andenes. La sanción se aumentará a 50 euros pero se dejará en 20 por pago inmediato.

Además, se intensificará la campaña de sensibilización «Yo sí» en el metro y en el tranvía.