«Argo» una hábil mirada a la crisis de Irán por Carlos Pumares

Estrella y buen actor, Ben Affleck presentó ayer fuera de concurso en San Sebastián «Argo» (en la foto), su tercera película como director. También la interpreta, pero hay que destacar la magnífica actuación de Alan Arkin en un divertido papel secundario. Se trata de una cinta muy inteligente sobre la crisis de los rehenes norteamericanos detenidos en su embajada en Irán durante más de un año con Carter en la presidencia de EE UU. La película explica la situación a quien no la conozca con un ritmo y tensión perfectos, puro entretenimiento. A concurso se proyectó «Blancanieves», de Pablo Berger. Aquí, la protagonista se llama Carmen, es hija de un diestro, escapa de la muerte con los enanos toreros y se convierte... ¡en una figura de los ruedos! Berger se equivoca de cuento: Carmen, por culpa de su madrastra –una excelente Maribel Verdú–, vive en una carbonera y es sometida a todo tipo de trabajos domésticos humillantes. ¡Eso es «La Cenicienta»! Además, hay un enano malísimo, sin la ternura del cascarrabias del cuento. Y, para colmo, la ha rodado muda y en blanco y negro. No sé bien por qué. A pesar de todo, esta marcianada tiene encanto, es divertida a ratos y entretiene.