Guadalupe

Ángel Villar ofreció la copa del mundo a la Virgen de Guadalupe

La copa del mundo que la selección española ganó en Suráfrica el 11 de julio fue llevada ayer por directivos de la Federación Española de Fútbol ante el altar de la Virgen de Guadalupe, en su templo de Ciudad de México.

El sacerdote Diego Monroi y Ángel María Villar, presidente de la FEF
El sacerdote Diego Monroi y Ángel María Villar, presidente de la FEFlarazon

El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, acudió ayer para escuchar la misa en la Basílica. En su homilía, Monseñor Monroy Ponce destacó los valores humanos que el deporte genera en la sociedad universal y consideró que es un vehículo de creación de fuerzas espirituales. «No se trata sólo del triunfo, sino de la espiritualidad que implica un esfuerzo de esta dimensión», afirmó.

La copa del mundo fue colocada ante la imagen de la Virgen de Guadalupe, patrona de los mexicanos, donde permaneció durante toda la misa. «¡Viva España!», gritó un aficionado al concluir la ceremonia religiosa, tras la cual los directivos españoles regalaron una camiseta de «La Roja», al vicario de la Basílica.

En conferencia de prensa celebrada unas horas antes en Ciudad de México, Villar explicó que es creyente y que siempre que ha viajado a México ha visitado la Basílica de la Virgen de Guadalupe. «Cuando vine a firmar el convenio (para disputar el partido amistoso contra México) escuche misa allí y pedí ser campeón del mundo. Soy un egoísta, esas cosas no se piden, pero la madre de Dios me lo ha concedido y al venir a jugar planteé la posibilidad de presentar ante la imagen la copa ganada en Suráfrica», dijo el directivo.

Por último, Ángel María Villar destacó el papel que desempeña la Virgen de Guadalupe co- mo «unificadora de todos los mexicanos».