Mijas

El detenido por dos muertes en la Costa de Sol admite su implicación

 El hombre de 42 años detenido el viernes en Mijas (Málaga) como presunto autor de la muerte de dos mujeres este verano en la Costa del Sol ha reconocido ante los investigadores su participación en ambos homicidios, han informado hoy a Efe fuentes próximas al caso.

Además, los primeros indicios apuntan a que el detenido, que pasará a disposición judicial mañana, podría tener antecedentes por otros delitos de sangre en otros países, según las fuentes.

La madre del presunto homicida y la compañera sentimental también han sido detenidas, ya que presuntamente el hombre entregó a la primera los teléfonos móviles y a la segunda las tarjetas de crédito que había sustraído a sus víctimas.

El móvil de los sucesos podría haber sido el robo, y según los investigadores el presunto autor eligió a mujeres vulnerables, actuó de forma sangrienta y las torturó para robarles.

Los agentes realizaron ayer un registro en el domicilio del detenido en el que hallaron indicios relacionados tanto con los homicidios como con los robos en las viviendas de las víctimas, han apuntado a Efe las citadas fuentes.

Además, se le tomaron las huellas para determinar su identidad y el ADN para comprobar a través de Interpol si podría tener antecedentes policiales o judiciales.

Los crímenes de la Costa del Sol ocurrieron los pasados 11 de agosto y 10 de septiembre. Las dos mujeres, ambas con nacionalidad española y de origen iberoamericano, fallecieron por arma blanca, y los informes preliminares de las autopsias revelaron ciertas similitudes entre ambos crímenes, según confirmaron a Efe otras fuentes cercanas al caso.

Durante estos meses, la Policía Nacional y la Guardia Civil han realizado diversas inspecciones oculares para completar la investigación y todo apuntaba a que podía tratarse de un asesino en serie, ya que existen numerosas coincidencias.

El primer crimen ocurrió en Calahonda (Mijas) y el segundo en el núcleo marbellí de San Pedro de Alcántara, por lo que había pocos kilómetros de distancia, las víctimas tenían la misma franja de edad y eran iberoamericanas que habían obtenido la nacionalidad española, además de que ambas estaban en apartamentos alquilados en la Costa del Sol.

El primer crimen fue descubierto el 11 de agosto, cuando una mujer de origen argentino y de 45 años fue encontrada muerta con varias heridas en una vivienda de una urbanización de Calahonda, núcleo de población de Mijas.

El hijo de la fallecida fue quien encontró el cuerpo en el interior del apartamento 205 de la urbanización Complejo Alhamar, situada a la altura del kilómetro 197 de la carretera N-340.
El segundo crimen fue el de una mujer de origen ecuatoriano, de 47 años, que falleció en una vivienda ubicada en el núcleo marbellí de San Pedro de Alcántara (Málaga).

Esta segunda mujer, que murió desangrada, recibió en torno a una docena de puñaladas, según reveló la autopsia, a la que tuvo acceso Efe. El cuerpo sin vida fue encontrado por otro inquilino de la vivienda que al llegar al domicilio descubrió lo sucedido y alertó a los agentes.