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Pinto silba y los «niños» ganan

Después de la sanción de dos partidos en la Liga de Campeones por intento de engaño a un rival silbando, el portero barcelonista José Manuel Pinto regresó el martes a la titularidad contra el Rubín Kazán y no se amilanó a la hora de silbar a sus compañeros para enviarles órdenes.

El meta Pinto celebra con el canterano Jeffren el quinto gol del Barcelona al Real Madrid en el clásico
El meta Pinto celebra con el canterano Jeffren el quinto gol del Barcelona al Real Madrid en el clásicolarazon

El jugador azulgrana fue sancionado tras el Barça-Copenhague después de que en un contragolpe del equipo danés el portero andaluz lanzase unos silbidos que llegaron a confundir al atacante, lo que motivó que éste abandonase su intento de medirse en uno contra uno con el meta.

Esta confusión en el Camp Nou generó una gran indignación en el rival del Barça, que solicitó una sanción contra Pinto, que al final se tradujo en dos partidos de suspensión. Tras la sanción, y debido a que el Barcelona ya no se jugaba nada contra el Rubín Kazán, el técnico, Josep Guardiola, volvió a confiar en él, ya que siempre le ha tenido en una elevada consideración por su carácter y por la capacidad que tiene de unir al grupo en el vestuario, a pesar de vivir casi siempre a la sombra de Víctor Valdés.

«Sigo silbando porque es una forma de comunicarme, totalmente lícita. Cuando tuve que declarar –antes de ser sancionado–, se dijo que este tipo de silbidos es normal en los técnicos porque tienen que mandar órdenes, y el portero da muchas órdenes», señaló ayer en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva.

El martes contra el Rubín, Pinto tuvo a un perfil muy diferente de compañeros, pues cinco de ellos era jugadores del filial, a los que dijo que no tuvo que enviar demasiados silbidos e indicaciones porque «suben bien enseñados».

«Los chavales de la cantera vienen aprendidos y entrenados. No hay muchas diferencias. Juegan con descaro y soltura contra los rivales. Es bueno que tengan esa valentía», precisó.
De sus habituales compañeros, Pinto se congratuló de que tres de ellos (Messi, Iniesta y Xavi) sean los finalistas para llevarse el Balón de Oro, que uno de ellos se llevará el 10 de enero en Zúrich. «Esto tiene mucho que ver con el trabajo de la cantera, porque todos ellos comparten la misma filosofía. Lo más importante es que son tres compañeros y esto es un orgullo. El premio será de la plantilla con cualquiera que gane de ellos», ha señalado.

Finalmente, el jugador se refirió a la confusión que se generó el pasado fin de semana en el viaje a Pamplona, y aseguró que se sintió «herido» porque en su opinión dio la sensación «de que no queríamos viajar. Me he sentido atacado. Hablo por mí. La Federación Española nos dio unas órdenes para no viajar. Nosotros fuimos una víctima más de la gente que no pudo viajar. Esto nos ha servido para estar más fuertes. El equipo respondió y esto te une más», manifestó el jugador.
El Barcelona se entrenó ayer en la Ciudad Deportiva con 16 jugadores del primer equipo y seis del filial (Miño, Bartra, Fontàs, Thiago, Jonathan y Víctor Vázquez).


Messi contestará hoy a las preguntas de los niños
El Embajador de Buena Voluntad de UNICEF y jugador del Barcelona, Leo Messi, mantendrá hoy un encuentro con un grupo de niños que durante semanas han elaborado las preguntas que le harían al deportista. Estos niños participan en el programa «Enrédate», una iniciativa de UNICEF España en Educación para el Desarrollo, que aporta a los escolares formación sobre la situación de la infancia y sus derechos. Niños de Argentina también podrán participar, a pesar de la distancia, formulando preguntas a Leo Messi. El argentino, que jugó unos minutos ante el Rubín Kazán porque siempre quiere ser de la partida, aunque el encuentro sea de trámite como el del martes ante los rusos, siempre se ha mostrado solidario con las causas infantiles y de hecho aceptó ser embajador de UNICEF. El Barcelona, además, en la etapa de Joan Laporta, llegó a un acuerdo con el organismo internacional para lucir su nombre en la camiseta sin percibir nada a cambio. Ahora habrá que ver las intencionadas preguntas que los niños le hacen a Leo Messi, seguro que son más orginales que los periodistas.