Reino Unido

Clegg: «Los recortes son el peaje para salir de la crisis»

El viceprimer ministro británico pide el apoyo de los suyos para mantener la coalición con los conservadores

El líder liberal demócrata, Nick Clegg, junto a su mujer, Miriam González, ayer en la clausura del congreso del partido en Brighton
El líder liberal demócrata, Nick Clegg, junto a su mujer, Miriam González, ayer en la clausura del congreso del partido en Brightonlarazon

LONDRES- Nick Clegg trató ayer de presentar a los liberal demócratas como un partido maduro de centro dispuesto a salvar a la economía británica y decidido a apretar el cinturón más a los ricos que a los pobres para salir de una de las peores recesiones desde la II Guerra Mundial. El político se enfrentó ayer a uno de los discursos más complicados de su carrera. Su intervención cerraba el congreso anual de su partido y también una semana en la que los militantes han tenido que ver cómo los sondeos les daban la espalda. Así que tenía doble tarea. Primero, justificar que la coalición con los conservadores es «el peaje a pagar para sacar al país de la crisis y convencer al electorado de la capacidad de la formación para gobernar». Segundo, que a pesar de las dudas de su liderazgo, él sigue siendo la mejor persona para llevar el timón del barco.

Reconoció que el pacto con los «tories» le ha valido insultos, pero recalcó que, mientras el país debe recorrer el camino «de los sacrificios de la austeridad hasta la recompensa de la prosperidad compartida», el Partido Liberal Demócrata debe ir «de la comodidad de la oposición a la dura realidad del Gobierno». «Los dos viajes están ligados» y, aunque «no serán ni fáciles ni rápidos», «valdrán la pena». Así, se negó a excluir nuevos recortes añadiendo que el tamaño del presupuesto es «una verdad incómoda que no podía ocultarse más».

Cansado del cartel de sumiso que sus detractores le cuelgan, Clegg animó a los suyos a vender mejor los logros. Les recordó que, gracias a su voz en Downing Street, se incrementó el umbral a partir del cual hay que empezar a pagar el impuesto sobre la renta, una medida que quedó eclipsada en el último presupuesto por la bajada de impuestos a las rentas más altas. Y sí, le hizo algunos reproches a David Cameron en cuanto a sus promesas medioambientales incumplidas, pero al mismo tiempo pidió a sus bases «paciencia» y «perseverancia» para completar la transición de la oposición al poder. «Hay que seguir mostrando disciplina y determinación para aguantar en la coalición, a fin de acumular la experiencia necesaria para, un día, gobernar en solitario», dijo.