La Habana

Pajín y Valenciano admiten que Castro les prohibió ver a los disidentes

Las Damas de Blanco han asegurado este miércoles que no les preocupa que las representantes del PSOE de visita en La Habana hayan decidido no reunirse con los familiares de los prisioneros de la Primavera Negra porque "lo que de verdad importa es que hagan algo positivo por los presos políticos en Cuba". 

Pajín y Valenciano admiten que Castro les prohibió ver a los disidentes
Pajín y Valenciano admiten que Castro les prohibió ver a los disidenteslarazon

El PSOE tanteó al PP antes del verano sobre la polémica visita a Cuba de una delegación socialista. Posiblemente lo hizo porque sabía que el movimiento iba a resultar muy controvertido. Tanto como para obligarle a buscar resguardo de una lluvia generalizada de críticas, no sólo, por cierto, del PP y de la disidencia interna y externa cubana.

La delegación socialista, encabezada por su secretaria de Organización, Leire Pajín, y por la secretaria de Política Internacional y Cooperación, Elena Valenciano, se hizo ayer las primeras fotos sobre el terreno en su papel de valedora del régimen cubano ante la Unión Europea. Ni en el álbum de ayer, ni en el que falta por completarse, quedará registrado ningún encuentro con algún representante de la oposición a la dictadura castrista. En el propio Parlamento Europeo han surgido voces que consideran inexplicable esa ausencia de contactos teniendo en cuenta –subrayan– que «la comitiva está compuesta por representantes de un partido democrático de España y no por miembros representantes de un Gobierno, lo que, lógicamente, es más delicado porque afecta directamente a las relaciones diplomáticas».

El PSOE ha justificado su sonoro plantón a las voces críticas con los hermanos Castro en el argumento de que el Partido Comunista y las autoridades cubanas «no los dejaban», y así se lo ha trasladado al PP. Uno de los objetivos del viaje es conocer a sus homólogos en materia de Relaciones Internacionales dentro del Partido Comunista de Cuba.

Los socialistas también razonan, en su defensa, que su misión es hablar con los «reformistas comunistas». O dicho de otro modo, que el PSOE entiende ahora que los cubanos deben aspirar a un sucedáneo de democracia, con una estructura de partido único, en el que prime la economía de mercado y una superestructura capitalista, tabla de salvación, al parecer, para salir del estado de miseria tan extrema a la que leo ha llevado el medio siglo sin libertad ni democracia.

Poco antes de que Pajín y Valenciano inauguraran la primera visita oficial del PSOE a la isla caribeña desde hace más de 15 años, según ellas mismas han subrayado, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, insistía en dar por hecho que España conseguirá finalmente cambiar la Posición Común de la Unión Europea con La Habana, informa Efe. Rodríguez Zapatero defendió también el «diálogo exigente» con el régimen cubano porque, a su juicio, «sólo el diálogo da resultados».

Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea acordaron el pasado mes de junio posponer hasta septiembre la revisión de su política hacia Cuba, la llamada Posición Común adoptada en 1996 y que supedita el diálogo con La Habana a los avances en materia de Derechos Humanos. De fondo están los últimos acontecimientos que se han producido en la isla y las excarcelaciones de presos de conciencia gracias a la labor de mediación de la Iglesia católica. Para el PSOE, esas excarcelaciones son la prueba definitiva de que se ha abierto una nueva etapa en Cuba.