Medidas que no pueden esperar por José Antonio VERA

Las elecciones de hoy son sobre todo fundamentales para la economía, principal problema de España junto al desempleo, pero también en general para numerosos sectores aquejados de una inactividad que resulta más que preocupante. Analizamos hoy en A tu Salud Verde, en particular, las acciones que serían necesarias abordar para dinamizar la sanidad, el medio ambiente, la ciencia y el turismo. Y formulamos la enumeración de cien medidas que se deberían adoptar cuanto antes si se pretende corregir la actual deriva. En el área sanitaria hacemos hincapié en la necesidad de sanear el sector. La sanidad española es de las mejores del mundo, pero su creciente déficit es su peor enemigo. Habrá que tomar decisiones de ahorro y eficiencia encaminadas a que los ciudadanos sean conscientes de lo que supone el gasto en sanidad, que aunque parezca gratis para la gente, no lo es en absoluto para el Estado, o sea, para todos los contribuyentes.

Disminuir la deuda, aminorar el déficit, pagar a los proveedores, liquidar a las farmacias y no perder calidad son diferentes aspectos de un mismo problema. El de la sanidad es, después del paro y la situación económica, probablemente la tercera preocupación más acuciante de España en estos momentos. Quien gane hoy las elecciones sabe que necesita sanear el sistema, y deberá abordar de una vez medidas como el copago, implantadas desde hace años en Europa entera, y aquí retrasadas por un planteamiento meramente electoral. En materia medioambiental destacamos la necesidad de clarificar las políticas con relación a las energías renovables. Es verdad que se trata de fuentes caras, pero no ayuda nada a su desarrollo hacer lo que el Gobierno hizo hasta hoy: cambios constantes en la regulación que han acabado desorientando al sector y por supuesto a los inversores. Las renovables son necesarias y deben ser rentables. España era una potencia eólica y solar, pero los bandazos del Ministerio de Industria y Energía en los últimos años nos han restado fuera imagen a nivel global, y hoy empezamos a ir a remolque de naciones como Alemania, Estados Unidos y China, mas activos que nosotros, y más convencidos de que la energía del futuro debe ser limpia y no contaminante.

El turismo, por último, debe ser objeto de un abordaje especial, en la medida en que sigue siendo la primera industria nacional. Los problemas en Túnez, Egipto y otros países norteafricanos han favorecido la reactivación, particularmente en regiones como Canarias, que hoy disfrutan de una ocupación total pese a la crisis. Pero el turismo no puede vivir sólo de circunstancias coyunturales. Hay que invertir en turismo para que sigamos siendo una potencia mundial en este ámbito. Hace falta renovar hoteles, volver al estilo amable que nos caracterizó en los años sesenta y abaratar precios para ser competitivos. Si no actuamos de esa manera, la vieja gallina de los huevos de oro se acabara muriendo sin dejar herederos. Algo que quien gane las elecciones debe corregir sin cometer errores esenciales.