Iván Vicente: «La moneda cayó de canto el pitón se quedó a 2mm de la femoral»

Iván Vicente no tuvo una tarde fácil el domingo en Valdemorillo. El torero madrileño fue cogido por el primer astado de la tarde provocándole una cornada de 15 cm. en la ingle, a tan solo 2mm de la femoral, y que le obligó a pasar por el quirófano de la Clínica Puerta del Hierro una vez terminada la corrida. Tras dos días ingresado, hoy, una vez le retiraron el drenaje, ha recibido el alta. "Me encuentro bien, no tengo mucho dolor más bien molestias al sentarme o al andar por la zona en que está la herida", afirma el diestro.

Todavía le quedan unos días de recuperación a Iván Vicente: "Los puntos me los quitan en unos ocho o diez días", desvela el diestro. Aunque estos días debe usar una muleta para andar, el espada de Soto del Real mostró sus intenciones de "coger los trastos"cuanto antes y no parar ahora.

"Sabía que me quería coger y que me iba a coger, lo tenía clarísimo", confiesa Iván Vicente sobre su primera faena en Valdemorillo. Pero admite que tenía que "hacer el esfuerzo"porque era su "única fecha cerrada". "Al final tienes que tirar una moneda al aire y puede salir cara o cruz. Esta vez cayó de canto porque al fin y al cabo tuve suerte de que la cornada no fuera más grave", admite el torero.

El diestro sabe que tuvo suerte: "Me levanté y sabía que algo llevaba, aunque también que no era grave porque apenas sangraba". "Ha estado a 2mm de la femoral", le dijeron cuando pasó por la enfermería de la plaza tras realizarle una primera cura. Aún así, el madrileño salió a matar al cuarto al verse en "condiciones"pese a que el "daño lo llevaba dentro".

"Tengo que dar las gracias al Doctor Vaca y su equipo, porque me trataron fenomenal. Me dijeron que era conveniente, una vez terminado el festejo, que me acercase al hospital para que me hicieran un reconocimiento y una ecografía para descartar daños internos. Y así lo hice. Una vez en el hospital vieron necesario abrir otra vez la herida e intervenir", desvela Iván.

Iván Vicente sabe que no hubo suerte el domingo, "viendo como salió mi lote fue imposible pegar los pocos muletazos que tenían". Aunque se queda con la satisfacción de la "entrega"que puso, y espera que "si el toreo es justo como lo es esto sea visto por los empresarios", y le sirva para estar en otras citas. Además admite haber recibido "llamadas y mensajes de reconocimiento de muchos compañeros y profesionales de este mundo"por su actuación en Valdemorillo.