Más moral que Manolo el del Bombo por KIKO

Qué grande el fútbol éste, qué jodido es. Los jugadores de Francia e Italia ya están hablando con sus respectivas agencias para que les agilicen sus vacaciones. Nosotros, el último partido, en el que estaríamos pensado qué rotaciones y dosificaciones haría Del Bosque, lo encaramos como si fuese unos dieciseisavos de final. Suiza en su día nos cortó cualquier experimento o visita al spa. Esta Chile a la que nos enfrentamos no es Honduras, pero no nos equivoquemos que tampoco es el Barça de Guardiola, pero nos obligarán a sacar lo mejor de nosotros. Y la tarjeta de presentación como aspirante al Mundial. Los soldados de Bielsa no se cortarán a la hora de imprimir un ritmo y una presión más de noviembre que de finales de junio, gracias a una chispa que no se suele llevar a estar alturas. El complejo no existe en el diccionario del míster chileno. Mi única alteración, que no preocupación, es que hay cabida para alguna variante en el once inicial cuando todos nos sabíamos de carrerilla la alineación. El estado físico condiciona mucho estos torneos de un mes. Una posibilidad es que juegue Iniesta en la derecha, aunque siempre me ha gustado en la izquierda, con la salida del regate hacia dentro. A pesar de todo, sigo compitiendo en moral y optimismo con Manolo el del Bombo y confío ciegamente en que hoy veremos a esa selección que nos cautivó con Xavi Hernández y Torres como pareja estelar. ¡A la bin, a la ban, a la bimbombán, España! ¿No digo yo que parece que me he comido a Ma- nolo el del Bombo?