Valencia

Fandiño salda a hombros su gesta en Valencia

Fandiño salda a hombros su gesta en Valencia
Fandiño salda a hombros su gesta en Valencialarazon

VALENCIA- Definitivamente, a la Feria de Julio le ha mirado un tuerto y nada sale a derechas. Iván Fandiño hizo el paseíllo en solitario, con el cielo encapotado, casi a oscuras y con la plaza medio vacía. Tampoco el ganado que tuvo enfrente le sirvió de alivio. El primero, de Alcurrucén, serio, con cuajo... y muy poca fuerza se defendió en la muleta, no dejando a su matador más que estar muy animoso. El segundo, de Adolfo Martín, se quedó corto en la muleta, siempre pendiente del torero, al que, finalmente, echó mano aunque sin consecuencias, afortunadamente. El tercero, primero de Fuente Ymbro, se rompió un cuerno contra un burladero y fue sustituido por otro de Alcurrucén, manso, sin gracia, ni fuelle ni fondo. Como el trasteo que dejó Fandiño, que no se confió ni dio coba con el cuarto, otro astado de Adolfo Martín justo de fuerza, mirón e incierto. Sólo al final se arregló la cosa. Con el quinto, de Fuente Ymbro, se lució al quitar por chicuelinas y aprovechó el viaje más largo del astado y su mayor claridad para componer un trasteo más templado pero a saltos y que se embarulló algo en el último tramo. Cerró plaza otro Alcurrucén muy serio, con casi 600 kilos de pitón a rabo, manso de libro en los primeros tercios pero que, aun a regañadientes y a arreones, embistió en la muleta y permitió una labor más entonada y lucida que amarró a costa de otro volteretón. Tercera de feria. Tres toros de Alcurrucén (1º, 3º bis y 6º), serios, sin fuerza el 1º, mansos 2º y 6º; dos de Adolfo Martín (2º y 4º), corto uno e incierto el otro; y uno de Fuente Ymbro (5º), gordo y noble. Iván Fandiño, ovación, ovación, silencio, silencio, oreja y oreja. Menos de un tercio de entrada.