Fermín Lucas: «Ifema tiene la responsabilidad de activar la economía»

«Constancia, imaginación y mucho trabajo son la receta para tener éxito», reconoce. Y parece que la fórmula funciona, pues los resultados le dan la razón: Ifema cerró 2010 con más de dos millones y medio de visitantes y un volumen de negocio de 116 millones de euros.

–Después del Aeropuerto de Barajas, Ifema es la institución más importante de Madrid. ¿Pesa la responsabilidad?
–No, pero tiene su explicación. Ifema es un consorcio de tres instituciones –Comunidad de Madrid, Ayuntamiento y Cámara de Comercio, con una pequeña participación de Caja Madrid– que tienen muy claro para qué trabajamos. Nuestra meta es generar valor añadido en la ciudad y dinamizar la economía. A nivel interno, el fin es ser lo suficientemente eficaces para no costar dinero y poder autofinanciarnos. El colchón de confianza que nos dan las tres entidades es muy grande, porque estamos cumpliendo con creces los objetivos.

–¿Qué peso tiene Ifema en la economía de la región?
–Genera unos 40.000 puestos de trabajo directos, además de valor añadido en hoteles, servicios, taxis... En total son 2.000 millones de euros al año, lo que se traduce en el 1,2 por ciento del Producto Interior Bruto de Madrid.

–¿Y qué aportan a la economía española?
–La posibilidad de internacionalizar la oferta. En Ifema, el 25 por ciento de los expositores son extranjeros y el 13 por ciento de los visitantes vienen de otros países. Esto convierte a la institución en una oportunidad única para que las pequeñas y medianas empresas españolas puedan exportar sus productos.

–Y eso es lo que ahora hace más falta.
–Sí, pero también es verdad que todo eso tiene unos costes de inversión que, lógicamente, hoy en día no todas las compañías pueden asumir.

–Entonces, ¿la crisis también se ha dejado sentir en Ifema?
–Por supuesto, ya que somos un fiel reflejo de cómo está la economía de cada sector. Si una industria es potente, la feria está fuerte, y si está tocada, la feria también se resiente.

–Los datos del sector turístico en España empiezan a hablar de recuperación. ¿Vamos por el buen camino?
–La industria turística es muy dinámica y tremendamente competitiva, capaz de adaptarse a circunstancias adversas de todo tipo, como catástrofes o cuestiones políticas. No digo que ahora esté fuera de la crisis, pero sí estoy convencido de que será de los primeros sectores en salir a flote.

–Ustedes ponen su granito de arena en la llegada de turistas de negocios. ¿Ha crecido este mercado en los últimos años?
–Mejora, pero relativamente, pues las empresas reducen el número de personal que envían a las ferias profesionales.

–Aún así, en 2010 cumplieron sus objetivos.
–Incluso los llegamos a superar, pero eso tiene una explicación, ya que los congresos se suelen cerrar con mucha antelación. Por ejemplo, acabamos de ganar un congreso de medicina de más de 15.000 personas que se celebrará en Madrid en el año 2013. Creo que el periodo malo llegará en 2012, porque serán los congresos que se cerraron en 2009.

–¿Qué perspectivas tiene para 2011?
–Aunque no lograremos cifras espectaculares, sí podremos mantener un nivel de negocio satisfactorio.

–¿Dónde está la clave del éxito?
–En apostar por un desarrollo empresarial muy objetivo y hacer las cosas con coherencia y no con fuegos artificiales. No todos los proyectos que creamos tienen por qué ser autosuficientes, pero sí debemos seguir la estrategia de que en el futuro tengan un desarrollo estable y eficiente, que sean rentables a nivel económico y también social.

–¿De qué le han servido estos años de difícil coyuntura?
–Para aprender a poner en interrogación todos los gastos que teníamos. Saber qué es productivo y qué no nos ha permitido reducir mucho los costes y por eso, gracias a Dios, no hemos dado pérdidas en ningún momento y somos una entidad saneada, sin un céntimo de deuda. Además, tampoco hemos tenido la necesidad de hacer ninguna regulación de empleo. Lograr buenos resultados en esta etapa difícil nos permitirá crecer en el momento en el que la economía vaya para arriba. Hay que estar en el momento justo y en el lugar adecuado, con los deberes hechos.

–Así dicho suena fácil, pero ¿cuál es su receta para salir de la crisis?
–Ajustar costes, reducir gastos, trabajar más y, sobre todo, tener más imaginación. Esa creatividad se pone en práctica a través de la creación de nuevas ferias. En concreto, este año tenemos varias novedades, como 100 X 100 mascota; Expomatec, que va ligada a la maquinaria de obra pública; Mercadísimo, abierta al público; y el Salón du Chocolat, que se hará en noviembre.

–¿No se ha «caído» ninguna feria esta temporada?
–En 2010 tuvimos que renunciar a la realización de varias citas, pero este año no ha sido necesario. Aunque una feria no sea objetivamente rentable, debemos mantenerla y seguir al pie del cañón. Nuestra responsabilidad es dar a las empresas la oportunidad de estar aquí y contribuir a la dinamización del sector. En este sentido, hemos reducido los precios, porque consideramos que somos una entidad creada para el desarrollo de la actividad económica y teníamos que adaptarnos a esa situación. Y lo seguiremos haciendo si es necesario, aunque la verdad es que ya no queda mucho margen de beneficios.

–¿Qué retos tiene por delante Ifema?
–Una empresa dinámica como la nuestra siempre debe estar mejorando, porque el servicio y la calidad son nuestras armas de competitividad. Y esa calidad se mejora en el día a día, observando y analizando todas las incidencias que se producen en cada feria o congreso. Además, creo que tenemos que trabajar mucho más la internacionalización y aprovechar la simbiosis perfecta que supone la unión de Ifema y Madrid.

–¿No entra en sus planes ampliar las instalaciones?
–Tenemos reserva de suelo y espacio, pero con la actividad económica actual creo que nuestra dimensión es más que adecuada. La ampliación se hará cuando el mercado lo demande, no por el capricho de tener más infraestructuras, pues eso podría condicionar nuestra rentabilidad.

–Habla de internacionalización. ¿En qué «charcos» está pensando meterse?
–En una época de globalización como la actual, salir al exterior nos permite exportar nuestro saber hacer y también la imagen de ciudad moderna que distingue a Madrid. Estamos trabajando en proyectos en Miami y haciendo estudios en China e Iberoamérica con el objetivo de realizar colaboraciones para el futuro. Seguir innovando es fundamental.

–Han ganado el concurso internacional de redes sociales. ¿Internet es una prioridad?
–Más bien diría que existe la necesidad de estar ahí. Tanto internet como las redes sociales son herramientas que debemos aprovechar al máximo, porque nos ayudan a involucrar a la gente y a saber lo que ésta demanda.

–¿Con qué se queda de los 13 años que lleva al frente de Ifema?
–No sabría elegir. Si hubiese conseguido todos los objetivos no tendría aspiraciones y aquí cada día tenemos algo más que hacer.

–¿No piensa en la jubilación?
–Mientras tenga ilusión por el trabajo y salud seguiré. Creo que me aburriría en otro sitio.

Un trabajador incansable
Ingeniero Aeronáutico Superior por la Universidad Politécnica de Madrid, Fermín Lucas asumió el cargo de director general de Ifema en abril de 1998. Con la mochila de la experiencia repleta de sabiduría profesional, Lucas no piensa en jubilarse: «No me veo levantándome por la mañana sin tener nada que hacer», asegura. Sin olvidar su etapa política, Lucas está convencido de que el Partido Popular arrasará el próximo 22 de mayo y confiesa que «España necesita unas elecciones anticipadas. Este país no puede estar parado un año más».