El concejal José Cabezos requiere escolta policial ante el acoso de medio centenar de sindicalistas

El hecho que propició la actuación policial fue las quejas y gritos de casi medio centenar de agentes de la Policía Local afiliados a UGT y que insultaron e increparon a Cabezos por considerar que otorgaba mayores privilegios al colectivo de bomberos frente al resto de los casi 1.500 empleados municipales. En especial, los sindicalistas consideraban que el agravio resultaba especialmente sangrante en el caso del cuerpo de la Policía Local que es en el que UGT posee su fuerza mayoritaria. El origen de las protestas obedeció al acuerdo entre el Ayuntamiento de Cartagena y las representaciones sindicales CC.OO, CSIF y SIME aprobaron en la Junta de Gobierno un acuerdo con vigencia hasta 2015 y que, según declaró el edil Cabezos, mejora las condiciones laborales de funcionarios, interinos y laborales incluidos los de los organismos autónomos.

El concejal de Personal y Hacienda apostilló que se alcanzó un acuerdo «democrático» en el que tienen cabida el 70 por ciento de los trabajadores que respaldan el texto. En cuanto a las discrepancias surgidas con la formación UGT, Cabezos resaltó que el Gobierno cartagenero mantiene la puerta abierta a la formación para alcanzar una postura intermedia por medio de la vía del diálogo.