Arganda del Rey

El gen «García-Fernández»

Detenido un hermano de «El Rafita» por arrollar a un hombre tras robarle su furgoneta hace casi un año. Está acusado de tentativa de homicidio

Hace casi un año, Ángel persiguió a los ladrones de su furgoneta hasta que les dio alcance. Se apeó del coche y se agarró a su vehículo. Le empotraron contra un contenedor y le dejaron 20 días en coma
Hace casi un año, Ángel persiguió a los ladrones de su furgoneta hasta que les dio alcance. Se apeó del coche y se agarró a su vehículo. Le empotraron contra un contenedor y le dejaron 20 días en comalarazon

MADRID-Vivir a base de vender motores robados lleva parejo muchos imprevistos. Después de desguazar el coche previamente sustraído hay que buscar un lugar lo más discreto posible para quemar el vehículo y borrar así huellas, controlar el fuego para que no arda todo el descampado, «colocar» las piezas robadas en el mercado negro lo antes posible... Aunque parezca fácil ser «descuidero» –el individuo que se lleva el vehículo con las llaves puestas–, el plan de los «cacos» puede complicarse y acabar cometiendo un delito mayor. Son esas situaciones en las que el propio delincuente se retrata como persona: o es un simple ladrón o es un homicida sin escrúpulos. Y, casualidad o no, los García Fernández ya han dado muestras de que no les tiembla mucho el pulso si tienen que llegar más allá de un simple robo, como si los llevaran en los genes. «El Rafita», el miembro más conocido de la familia, es tristemente famoso por participar en el asesinato, atropello y violación de Sandra Palo, pero acumula una docena de detenciones, la mayoría, relacionadas por robos de coches y la seguridad vial (porque no tiene carné de conducir).

26 antecedentes
Y es que el robo, desguace y reventa de piezas es algo así como el negocio familiar y prácticamente todos sus miembros se dedican a ello en alguna parte del proceso. Ahora, se ha conocido que otro hermano del joven, implicado –como no– en el robo de una furgoneta, tampoco dudó en llevarse a una persona por delante con tal hacerse con la suya. Se trata de Manuel García Fernández, de 28 años y con 26 antecedentes, arrestado el pasado jueves por un delito de homicidio en grado de tentativa y el robo de una furgoneta. Ocurrió el pasado 10 de noviembre en Arganda. Manuel se llevó al descuido la furgoneta de Ángel, el propietario de un bar de la localidad que se había bajado un momento. Ángel se dio cuenta y les persiguió en otro vehículo hasta Moratalaz. Allí, lograron alcanzarles y el propietario de la furgoneta se agarró a la puerta del copiloto, pero Manuel no dudó en acelerar llevándose por delante a Ángel. Acabó estampándolo contra un contenedor. Él también resultó herido y su ADN quedó en el volante de la furgoneta. El juez ha decretado su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza. En septiembre del año pasado, varios familiares de «El Rafita» fueron detenidos en el marco de la «operación Ceniza» por robar, desguazar y quemar coches en la Cañada Real.

«Perdí memoria y la visión del ojo derecho»
Ángel estuvo 20 días en coma después de que el hermano de «El Rafita» decidiera llevárselo por delante y estamparlo contra un contenedor de basura tras robarle la furgoneta. El hombre, de 38 años, ha perdido a causa del accidente la visión del ojo derecho, tiene fallos cognitivos y de memoria y pie equino, por lo que camina con dificultad. «No recuerdo mucho de lo que pasó ese día, la mayoría me lo ha contado la persona que me acompañó en la persecución y la Policía», explicó ayer Ángel, propietario del bar Rangel en Arganda del Rey. Al parecer, se bajó «un momento» de la furgoneta para pegar un cartel de una carrera de motos en la que iba a participar y, cuando se dio la vuelta, alguien se estaba subiendo ya al vehículo en marcha. Los 15 minutos en los que llegaron desde Arganda hasta la calle Arroyo Fontarrón se le hicieron eternos. Una vez les dio alcance, Ángel no dudó en apearse del vehículo en el que iba y darles alcance. Se sujetó a su furgoneta para que los ladrones se dieran por vencidos pero nada más lejos de la realidad. Aceleraron, arrastrando a Ángel durante unos metros para terminar empotrándolo contra un contenedor de basura. Los «cacos» también resultaron heridos; huyeron a pie y sin la furgoneta.