Eguiguren y la cúpula de Interior de 2006 declaran en secreto por el «Faisán»

La pasada semana fueron llamados a declarar, en el Juzgado Central de Instrucción 5 de la Audiencia Nacional, cuyo titular es Pablo Ruz, que investiga el llamado «caso Faisán», integrantes de las cúpulas de la Policía y la Guardia Civil durante el llamado «proceso de paz» (marzo de 2006-junio de 2007) y el presidente del Partido Socialista de Euskadi, Jesús Eguiguren, uno de los más activos participantes en dicho proceso, según han informado a LA RAZÓN fuentes conocedoras del asunto.

Las comparecencias, dentro de la máxima discreción, se produjeron en relación con la parte de la Comisión Rogatoria, remitida por la juez francesa Laurence Le Vert (nueve folios) que el magistrado español mantiene secreta para las partes personadas, aunque no para el fiscal. Podrían estar relacionadas con unos números de teléfono que llevaba el etarra Juan Carlos Yurrebaso, uno de los participantes en la negociación con el Gobierno durante ese «proceso», o con las actas que la banda redactó sobre lo acontecido en dichas conversaciones.

Entre las personas citadas, además de Eguiguren, estarían el que fuera director general de la Policía y de la Guardia Civil, Joan Mesquida; los directores de apoyo operativo de ambos cuerpos, el comisario Miguel Ángel Fernández Chico (que continúa en el puesto) y el general José Manuel García Varela (ya retirado); y los jefes de Información, el comisario Telesforo Rubio (destinado ahora en Moscú) y el general Martín Alonso (que sigue en Información).


Dos hipótesis
El secreto de las actuaciones impide saber los motivos de las citaciones. Las fuentes consultadas hablan de dos hipótesis. Por un lado, podrían estar relacionadas con el teléfono que en su día se entregó al que fuera director general de la Policía, Victor García Hidalgo, para que, en caso de que miembros de ETA que participaban en la negociación fueran detenidos, se pudieran poner en contacto con él para que tratara de gestionar su liberación.

El número de este teléfono, y otro, estaban en poder del etarra cuando fue arrestado el 29 de marzo de 2007 en Francia. Yurrebaso, que formaba parte del equipo de negociación de la banda, llevaba anotados en un cartón, en el que había escrito «España», dos números de móvil terminados en 2131 y en 7190. Aseguró a los agentes que le habían arrestado, que si le dejaban llamar sería puesto en libertad, ya que existía un compromiso al respecto.

El 14 de mayo de 2007, la juez Laurence le Vert remitió una Comisión Rogatoria a España para que se identificara a los titulares y a los que hubieran podido utilizar los teléfonos con esos números, uno de los cuales había sido usado por el entonces director general de la Policía, Victor García Hidalgo. De forma inexplicable, lo había utilizado para realizar determinadas llamadas, particulares y profesionales (entre ellas a algunos de los que fueron citados la pasada semana) pese a que, supuestamente, se le había entregado con la sola finalidad de que sirviera para comunicaciones de etarras. Las fuentes consultadas no alcanzan a comprender, si es que se confirma, por qué ha incluido ahora la juez Le Vert este asunto en la Comisión Rogatoria sobre el asunto «Faisán». Por ello, se inclinan a pensar que en dicha Comisión, como apuntó recientemente Dignidad y Justicia, una de las partes personadas, podrían estar parte de las actas que ETA escribió durante el proceso de negociación 2006-2007 y que se le incautaron al entonces jefe del «Aparato Político», Francisco Javier López, «Thierry», detenido Francia en mayo de 2008.

En este caso, el magistrado habría querido conocer de primera mano si, por parte del Gobierno, se indicó en algún momento a los responsables de las Fuerzas de Seguridad que debían cesar en la actividad antiterrorista contra ETA o, en su caso, aminorar la presión.