El principio del fin

ETA ha anunciado que deja las armas. ¡Ya era hora! Han tenido que verse derrotados por la sociedad vasca, el Estado de Derecho, la Policía y por su propio mundo. Sin embargo, esto no ha acabado. No ha hecho más que empezar, pero ya es un camino sin retorno. Ahora toca iniciar una nueva etapa hacia una reconciliación que tardará años en llegar. Será una ruta llena de obstáculos, de incomprensiones... No será fácil pero valdrá la pena. Dejaremos a nuestros hijos un mundo sin violencia.

Algunos pretenden que ETA claudique, pida perdón y se disuelva. Dicen que el paso es insuficiente. Están errados. Es un gran paso adelante. ETA ha tocado retirada. No habla de discutir las causas del «conflicto». Ha introducido un matiz, sin duda importante, y habla sólo de discutir las consecuencias. Se hablará de entrega de armas, de presos y del cumplimiento de la legislación. No se habla ni de autodeterminación, ni de integración del País Vasco y Navarra.
Otros pretenden que las víctimas sean olvidadas. ¡Naturalmente que no! No hay reconciliación sin memoria. Las víctimas no pueden parar el proceso pero deben estar presentes en todo momento porque son básicas para recuperar una convivencia en normalidad, aunque ésa tarde en llegar porque muchas heridas están todavía abiertas.

Rajoy, después de muchas insidias, insinuaciones y manifestaciones empieza a ejercer de presidente, sabedor de que él será el que gestionará el nuevo tiempo de la paz. Bienvenida sea a la sensatez. Espero que sea capaz de mantener a distancia a esos que consideran la rendición de ETA como una mala noticia porque desaparece su enemigo preferido. Saben que esto ya no es una tregua, es el principio del fin.