Cornet delegado del Consorcio de la Zona Franca

barcelona-Jordi Cornet fue nombrado ayer por el Consejo de Ministros delegado especial del Estado en el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB), cargo en el que sustituye al socialista Manuel Royes y al que llega después de una dilatada trayectoria en el PP catalán, tanto en el ámbito municipal como en la política autonómica desde que inició su militancia en 1986.
De la misma manera que la nueva delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna, es una de las personas de máxima confianza de la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho. Cornet, de hecho, es el secretario general del PP catalán desde el congreso de julio de 2008 y fue el número dos de la lista del PP en las autonómicas por Barcelona, elecciones en las que Llanos de Luna iba de número tres.

Cambios en el Parlament
Su nombramiento al frente del Consorcio de la Zona Franca le obliga a dejar su acta de diputado en el Parlament, en el que además es secretario primero de la Mesa. Entrará en la Cámara catalana la concejal de Badalona Sonia Egea, pero todavía no está claro quién sustituirá a Cornet en la Mesa, un cargo de mucha visibilidad que podría recaer en Pere Calbó, según señalan fuentes del partido, aunque este nombramiento no está confirmado.

Cornet, barcelonés de 46 años, casado y padre de cuatro hijos, ha sido el artífice de las últimas campañas electorales del PP, marcadas por la tendencia al alza de la formación. Antes de entrar en el Parlament, desarrolló buena parte de su carrera política junto a Alberto Fernández, primero como concejal del Ayuntamiento de Barcelona (1995-2010) y también como portavoz del partido en la Diputación.

El nuevo delegado del Estado en el Consorcio de la Zona Franca, es diplomado en Ciencias Empresariales por la Universidad de Barcelona (UB).

Llanos de Luna se reúne con Mas
Artur Mas se reunió por primera vez con la delegada del Gobierno en Cataluña, María de los Llanos de Luna, a la que recibió en el Palau de la Generalitat. El encuentro llega dos semanas después del nombramiento de Llanos de Luna, donde defendió la «administración única» para evitar duplicidades y simplificar estructuras en aras de la austeridad, y tendió la mano al Govern para favorecer la colaboración entre administraciones.