Segundo fallecido por un golpe de calor este verano en la provincia

En base al cambio climático, un estudio realizado por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) asegura que para 2070 Sevilla tendrá un clima similar a Tucson, junto al desierto de Arizona. Días como el de ayer –unido a otros muchos anteriores desde finales de julio– convencen hasta a los más incrédulos de que esta apocalíptica predicción puede estar en lo cierto. Por si fuera poco, en lo que va de verano, dos personas han muerto a causa de las altas temperaturas en la provincia.

El pasado domingo falleció un hombre de 38 años en Sevilla como consecuencia de un golpe de calor, según confirmó la encuesta epidemiológica realizada por la Junta y difundida ayer por la Delegación de Salud. Esta persona ingresó el 25 de agosto en el hospital Virgen Macarena tras una prolongada exposición al sol, consumía fármacos depresores del sistema nervioso que oprimen la regulación de la temperatura corporal y, por tanto, la sensación de calor y la necesidad de beber agua. Este domingo, estaba activada la alerta amarilla en toda la provincia, por máximas superiores a 38 grados.

Anteriormente, el pasado 8 de julio, igualmente con la alerta amarilla activada, una mujer de 55 años diabética murió, también por un fallo en la termorregulación corporal por la exposición a las altas temperaturas, en el hospital Virgen Macarena.

Desde junio, en Andalucía han muerto siete personas por golpes de calor, según la Consejería de Salud. Los citados casos en Sevilla; otras dos personas en Córdoba; y una en Jaén, Málaga y Almería.

El pasado año, Andalucía registró cinco muertes por golpes de calor –sólo una con la alerta por altas temperaturas activa– y 182 agravamientos de las patologías de base en personas frágiles. En Sevilla, el caso más destacado en la capital fue el del menor que murió tras permanecer varias horas en un coche cerrado por un «olvido» de su padre, que fue condenado a un año de prisión.

Según las investigaciones, el problema de la mortalidad por altas temperaturas va en aumento. Los más afectados son los mayores de 65 años, aunque en días de temperaturas extremas también se hallan en peligro otros grupos de edad.

Este agosto «lucha» por convertirse en el mes más cálido de los últimos 30 años para este periodo, con un grado por encima de la media, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). El Valle del Guadalquivir ha vivido alrededor de los 42 grados muchos días e, incluso, en Sevilla, Córdoba y Jaén se han alcanzado los 43 y 44 grados.

La media histórica de las máximas de agosto en la capital andaluza es de 35 grados y la mínima, de 18,6 grados. En agosto de 2003, uno de los peores años en cuanto a muertes por golpes de calor, con 15 víctimas, Sevilla alcanzó los 45,2 grados. El pasado 12 de agosto, no obstante, se sufrieron 42,3 grados.

La Aemet mantuvo ayer la alerta en Sevilla, Córdoba y Jaén; y la activó en Huelva y Cádiz. La previsión es que hoy bajen las temperaturas y suban el fin de semana.


Dieciséis días con máximas rondando los 40 grados
El año 2003 se recuerda en Sevilla por las numerosas muertes por golpes de calor –además de por la explosión en Las Letanías–, duplicándose en la primera quincena los índices de mortandad, con una quincena de fallecidos. Entonces, se vivieron catorce días seguidos con más de 40 grados, desapareciendo, incluso, las reservas de hielo en la ciudad. Este 2010, las muertes en la capital, hasta ahora, han sido dos y las jornadas por encima de los 40 grados, según los datos consultados en la Aemet, al menos, siete. Una de ellas, el 12 de agosto, registrándose 42,3 grados de máxima. Otras cuatro jornadas, la máxima se situó en 39 grados; y otras cinco, en 38 grados. En total, como mínimo, dieciséis jornadas alrededor de la barrera de los 40 grados. Agosto ofreció un respiro del día 13 al 19, con 33 grados de máxima como media. El mes acaba con el mercurio marcando 37 grados como previsión más alta y 21 grados de mínima. En septiembre, se retornará a los umbrales de los 40 grados.