F-1

Valencia

Fernando Alonso va en serio

Fernando Alonso ha conseguido un nuevo objetivo en su lucha por el Mundial. Mañana saldrá desde la primera posición en el GP de Singapur, por delante de Vettel y de Hamilton. Massa quedó eliminado en la Q1 al quedarse parado su coche.

La Razón
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Hace dos meses Ferrari y Fernando Alonso dieron un puñezato en la mesa. El F10 había quedado atrás en cuanto a competitividad y tenía muy lejos a los McLaren y sobre todo a los Red Bull Racing. El trabajo realizado en verano fue arduo y en Valencia empezó la remontada. El resultado de aquella carrera no fue bueno, pero desde entonces las cosas mejoraron de forma considerable.


La victoria en Alemania y, sobre todo, la última lograda en Italia ha catapultado a Alonso hacia el título. Hoy ocupa la tercera plaza en la general y sin embargo, por su estado de forma y mental, representa la principal amenaza para Webber, Hamilton, Vettel y Button. Aterrizó en Singapur con muchas dudas y ayer las disipó todas.

Marcó la «pole position» después de llevar a cabo una vuelta magistral en la que Vettel quedó muy sorprendido. Lo mismo que en Ferrari, que ayer vivieron una situación de pánico que podía haber terminado con sus aspiraciones al título. Alonso acabó en lo alto de la clasificación y su compañero en último lugar debido a un problema eléctrico, que le dejó varado en mitad de la pista nada más empezar la primera tanda clasificatoria.

Además, Alonso encendió las alarmas cuando poco después afirmó por radio al equipo que el coche iba raro. Cosas de la electrónica. Pasó por boxes, resetearon la centralita y regresó a pista para continuar su exhibición. La situación de Massa es un problema añadido para Fernando Alonso porque el brasileño ya tiene claro su papel dentro de la escudería en las carreras que restan por disputar. Al parecer Massa fue reprendido por varios responsables de Ferrari por su actitud en Monza durante la salida, en la que casi choca con su compañero. Hoy arrancará desde la última posición y no podrá hacer nada para ayudar a Ferrari. Es decir, restar algún punto a los rivales de Alonso.

El español arrancará desde la primera posición y como él mismo dijo, es el mejor lugar para hacerlo llueva o no, porque en Singapur puede pasar de todo. Además, es un escenario donde las previsiones apenas tienen valor debido al clima tan particular de este país asiático. El cielo descarga en cualquier momento. Alonso no puede fallar en la salida (algo que desgraciadamente ha ocurrido en varias ocasiones durante la temporada), aunque justo detrás tiene al Red Bull de Vettel, que no se caracteriza por sus salidas fulgurantes.


La principal amenaza se llama Lewis Hamilton, que partirá desde el tercer puesto.
Lo sorprendente de la clasificación de ayer fue la posición del líder, Mark Webber, que cayó hasta la quinta plaza y a medio segundo de Alonso. Todos apuntaban a la gran competitividad de los monoplazas energéticos en este trazado, pero de momento sólo Vettel ha funcionado.

La salida será fundamental porque la posibilidad de adelantar es escasa. Si Fernando no tiene problemas será complicado arrebatarle el triunfo. Los simuladores hablan de una sola parada en boxes y resultará importante la labor de los mecánicos, que en este lugar, debido a los horarios nocturnos, entran a trabajar a las 3 de la tarde y aprovechan la noche de Singapur para hacer cosas diferentes que no pueden realizar en otras carreras. Algunos equipos han tomado medidas para no romper la concentración habitual.

Por su parte, en Singapur está brillando a gran altura Jaime Alguersuari, que a punto estuvo de colarse en la Q3. Sacó a su compañero casi un segundo, y eso es un dato a tener muy en cuenta. Arrancará desde el undécimo puesto.