El 67% de los parados mayores de 55 años lleva más de un año sin empleo

Madrid- Como bien señala Cáritas en su último informe anual, el aumento del desempleo y la precarización del trabajo son dos de los principales motivos que están haciendo de la pobreza un fenómeno «más extenso, intenso y crónico». El paro se ha multiplicado por tres en los últimos cinco años, y el número de hogares con todos sus miembros sin empleo se ha multiplicado por cuatro hasta rozar los dos millones. En este sentido, los mayores de 55 años han sido uno de los colectivos más castigados desde el inicio de la crisis. Según un informe de la patronal de grandes empresas de trabajo temporal (Agett), el número de personas mayores de 55 años que han pasado a engrosar las listas del paro se ha cuadruplicado desde 2007. Así, son ya casi medio millón –sólo eran 131.700 cuando estalló la recesión–, lo que supone la mayor cantidad de desempleados de este grupo de edad en toda la serie histórica. Además, se trata de un colectivo que se ha incorporado a la búsqueda activa de empleo de una forma muy intensa. La necesidad de conseguir ingresos extra para compensar la pérdida de empleo de los demás miembros del hogar ha conducido a esta generación a tener que salir en busca de trabajo. No obstante, esta búsqueda no suele tener éxito: dos de cada tres nuevos activos mayores de 55 años que salen al mercado laboral han pasado directamente al desempleo. Por este motivo, la tasa de paro de este colectivo ha pasado del 5,5 por ciento en el tercer trimestre de 2007 al 16,8 por ciento del segundo trimestre de este año, es decir, se ha triplicado con la crisis. El dato es preocupante pues se trata de personas cuya jubilación va estando más próximo y necesitan seguir cotizando para poder obtener una pensión adecuada. Respecto al perfil, casi seis de cada diez son hombres, y dos terceras partes lleva más de un año buscando trabajo sin conseguirlo. El informe revela un hecho que bien podría servir para cualquier franja de edad: a mayor formación, menor tasa de paro. Así, el paro entre los mayores de 55 años en posesión de un doctorado es tan sólo del 2 por ciento. Para aquellos con estudios universitarios, asciende al 8,3 por ciento, mientras que esta cifra se eleva hasta el 14,1 y el 18,3% para quienes cuentan con estudios de Educación Secundaria de segundo y primer ciclo, respectivamente, subiendo hasta el 23,4 por ciento para quienes sólo tienen estudios primarios. El dato se dispara al el 58,6 por ciento entre los mayores de 55 años que no tienen ningún tipo de formación.