Los Mossos presentan su nueva arma antidisturbios para la final de la Copa

BARCELONA- Con motivo de la final de la Copa del Rey que disputarán mañana en Valencia el Barcelona y el Real Madrid, los Mossos d'Esquadra contarán con diez unidades de su nueva arma antidisturbios, siempre en el caso de que haya incidentes violentos, con independencia del equipo ganador.
El objetivo es evitar que se vuelvan a reproducir episodios violentos, como los ocurridos en algunas de las últimas celebraciones del Barça, en la zona de la rambla de Canaletes y del centro de la ciudad. El comisario Sergi Pla explicó que la nueva arma se utilizará siempre antes que las pelotas de goma, pero que no se trata de una sustitución.

A distancia
De cara a la celebración de mañana, la idea es que si hay exaltados el dispositivo de la Brigada Móvil se mantenga a distancia de la masa de gente para evitar el cuerpo a cuerpo que causa más heridos, lo que será más fácil de conseguir con este armamento porque permite identificar y detener a los que causan altercados.
El armamento Brugger–Thomet GL–06 dispara unos proyectiles de espuma compacta con una alta precisión hasta a 100 metros que genera un daño menor que las tradicionales pelotas de goma, ya que no produce lesiones internas.
Se puede disparar desde el cuello hacia abajo, ya que si se dispara a los ojos puede causar pérdida del globo ocular del mismo modo que las balas de goma, si bien en el resto del cuerpo causa un fuerte dolor y permite que la persona quede inmovilizada durante un rato.
No obstante, Pla avisó de que si impacta contra personas exaltadas que están con mucha adrenalina puede que no les inmovilice. Esta lanzadora –que originariamente era un armamento de guerra y que se ha adaptado a las necesidades policiales– tiene como inconveniente que no permite dispersar a masas violentas porque al ser muy precisa pierde la aleatoriedad, que sí tienen las balas de goma, que hacen que la gente corra por si acaso.
Para las posibles celebraciones de la final de la Copa, un total de 963 agentes de los Mossos vigilarán en toda Cataluña, 623 de ellos en Barcelona. Los principales objetivos serán controlar los accesos al centro de la ciudad y, especialmente, a la zona de la rambla de Canaletes.