PP ERC IU y BNG condicionan el Pacto a que Gómez «aparque» el retraso de la jubilación

Por su parte, CiU y PNV se han mostrado más favorables a la negociación tras la intervención inicial del ministro ante la Comisión, durante la que ha asegurado que hay "una gran variedad de fórmulas a considerar"para retrasar la edad "ordinaria"de jubilación, sin referirse explícitamente a la propuesta de elevar la edad legal de 65 a 67 años.

"Este Gobierno ha vuelto a la arbitrariedad", ha asegurado el portavoz 'popular' en la Comisión, Tomás Burgos, quien ha sido el primero en exigir a Gómez que renuncie a la propuesta de elevar la edad de jubilación, ya que pone en cuestión los derechos generados por los cotizantes actuales.

Aunque ha mostrado la disposición del PP a abordar la reforma de las pensiones, porque la tendencia de las cuentas del sistema apunta a que la Seguridad Social "está abocada al déficit a no tardar mucho", ha lamentado que el Gobierno ha sacado el debate de pensiones del marco parlamentario y lo ha esgrimido como "arma"de negociación en las instancias internacionales "en un enorme alarde de arrogancia"que ha tenido su clímax en la congelación de las pensiones.

Sin embargo, las medidas que han "ninguneado"al Pacto no acaban ahí, denunciando también la decisión "unilateral"del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de extinguir el régimen de clases pasivas de los funcionarios, una cuestión sobre la que, según ha revelado, ya existía acuerdo en el seno del Pacto.

"Cada paso que dan nos lleva más a la ruptura del acuerdo", ha incidido, después de preguntar al presidente de la Comisión, Juan Morano, si había recibido alguna comunicación del Gobierno instando a acelerar los trabajos parlamentarios, a lo que éste ha respondido negativamente.

El diputado de CiU, Carles Campuzano, ha asegurado que los "puntos de discrepancia"son "menores"y ha reclamado que se huya del "alarmismo"y, aunque ha admitido que era "inevitable"que los trabajos parlamentarios "ordinarios"no se vieran afectados por la crisis, se necesitan reformas "sí o sí"y que se asuman las responsabilidades con las generaciones futuras.

Campuzano se ha mostrado a favor de acercar la edad real de jubilación a la edad legal, pero ha señalado que "no es conveniente"un aumento "obligatorio"de la edad de esta última por encima de los 65 años "en estos momentos", y también ha apostado por mejorar la contributividad del sistema elevando el periodo de cálculo de las pensiones, incluso a toda la vida laboral. En estas dos propuestas, a su juicio, "hay espacio para el acuerdo".

El portavoz de Empleo del PNV, Emilio Olabarria, ha asegurado que el sistema público de pensiones tiene problemas "muy serios"respecto a su sostenibilidad y la financiación, que es problema de nuestros "hijos y nietos", que necesita el debate.

"Yo estoy dispuesto a negociar con usted", ha señalado Olabarria, si bien ha lamentado el "esoterismo"de las palabras del ministro. "Se trata de hacer algo", ha señalado, negando que la solución sea "acojonar"a los ciudadanos para arrojarlos a los planes privados de pensiones.

El diputado de ERC Joan Tardá ha acusado al Gobierno de "acojonar a la ciudadanía"e "instalar el terror"entre los trabajadores que ven cómo se desmantela el Estado del Bienestar y ahora se "amenaza"a las pensiones. "Quien es el primo de Zumosol al que se tiene que pedir permiso para que ustedes busquen complicidades en el Congreso", se ha preguntado el diputado republicano, quien ha dicho que si Gómez se compromete a "aparcar", siquiera "transitoriamente", la propuesta de los 67 años, se entrará en una vía de negociación que dará "en 72 horas".

Su compañero de grupo parlamentario y diputado de IU, Gaspar Llamazares, ha advertido al Gobierno que "no admitirá"ni el emplazamiento a acelerar los trabajos de la Comisión, ni el dogma demográfico como excusa para reformar las pensiones "mirando a los mercados"haciendo cosas "propias de la derecha". "Hay tiempo para el análisis", ha remarcado, señalando que su formación sólo sería partidaria de apostar por los incentivos voluntarios al retraso de la jubilación.

Por último, la diputada del BNG Olaia Fernández Dávila ha acusado al Gobierno de "hacer el trabajo al capital"con la reforma de las pensiones y ha rechazado las prospecciones demográficas del ministro de Trabajo. "Yo soy aficionada a leer esquelas y hay más gente que muere con 50 años de las que usted piensa", ha argumentado, añadiendo que sólo sería partidaria de frenar las prejubilaciones si se garantiza el empleo a los trabajadores de más edad.

Por su parte, la socialista Isabel López i Chamosa ha remarcado que es el momento de remarcar que existe un sistema fiable y de futuro pero que las reformas son necesarias y se ha mostrado convencida de que "va a haber acuerdo".