Crisis del PSOE
CiU se propone gobernar con una «mayoría tranquila» de más de 60 diputados
Con estas cifras, CiU rozaría la mayoría absoluta, situada en 68 diputados del total de 135 escaños del Parlament pero que según Puig hoy por hoy parece "muy difícil"de alcanzar.
En cambio, con las últimas encuestas en la mano, Puig sí ve más que factible obtener entre 60 y 65 escaños, lo que permitiría a Artur Mas gobernar sin excesivas "dependencias"de otros partidos.
Tras la reunión del secretariado permanente de Convergència, Puig ha explicado que el objetivo de CiU en las próximas semanas será ir a buscar los apoyos necesarios para conseguir esta "gran mayoría tranquila para gobernar sin hipotecas ni condicionantes internos", que han hecho del tripartito un gobierno "frágil".
De todas formas, ha asegurado que CiU no debe "distraerse"ni relajarse por los buenos augurios que le ofrecen las encuestas y tiene que seguir capitalizando el "deseo muy mayoritario de cambio"en la sociedad catalana.
Puig también ha abogado por intentar recuperar la confianza de los ciudadanos en los políticos, muy mermada en los últimos años, "sobre todo"debido a "un estilo de hacer política muy basado en el partidismo, la destrucción de adversario y el intervencionismo"del tripartito, aunque con "errores"también por parte de CiU, que afronta esta campaña electoral con "propósito de enmienda".
Por otra parte, Puig ha cargado contra el Govern por "engañar"a los ciudadanos al afirmar que gracias al límite de velocidad en los accesos a Barcelona se ha conseguido reducir la contaminación. Puig ha argumentado que este descenso de la contaminación se debe a la "reducción del tránsito"provocada por el estallido de la crisis económica.
En este sentido, ha ironizado sobre la posibilidad de que los socialistas acaben revocando esta limitación si gobiernan durante la próxima legislatura: "Después de cuatro años tomándonos el pelo, ahora dicen que están dispuestos a suministrarnos crecepelo".
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