Los sindicatos piden a Rajoy referéndum o lo harán ellos

Valencia- Ocho días después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunciara en el Congreso de los Diputados las nuevas medidas de ajustes, y tras una intensa semana para la Comunitat por el ERE en RTVV, decenas miles de personas se manifestaron ayer por las calles de las tres capitales de provincia en contra de los recortes.
En Valencia, 35.000, según la Policía, y 250.000, según los sindicatos, fueron las personas que se echaron a la calle en señal de protesta por estas medidas. En Alicante, fueron 35.000 y 70.000, respectivamente.
En su manifiesto, leído por la periodista de Canal 9, Chelo Miralles, los sindicatos reclamaron al presidente del Gobierno un referéndum sobre los recortes y advirtieron de que, si no lo hace, serán ellos los que convoquen una consulta. Anunciaron que antes de que acabe el mes de julio celebrarán una Cumbre Social y Sindical para decidir el calendario de las próximas movilizaciones.
Representantes de diversos colectivos sociales y profesionales, como la Confederación Española de Policías, la Plataforma de la Dependencia o los trabajadores del ferrocarril, estuvieron presentes en la protesta de Valencia.
Bajo el lema de «Quieren hundir al país, hay que impedirlo», la manifestación contó con otras pancartas como «No habrá paz para los malvados», «Pasado hipotecado, presente recortado, futuro jodido» o «El próximo parado que sea un diputado».
La manifestación se desarrolló sin altercados, a excepción de un pequeño grupo de protestantes que se concentró frente a la casa de la alcaldesa de Valencia.
El secretario general de CCOO, Paco Molina, aseguró que el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, pasará a la historia como Fabra «el despedidor». Además tachó al presidente de la patronal, Joan Rosell, de «fariseo» por decir que hay que profundizar en las medidas de ajuste.
El líder de UGT, Conrado Hernández, insistió en que no están dispuestos a que el PP «arruine» el país y criticó que todas las medidas vayan dirigidas a los sectores más débiles.
Los representantes políticos de la izquierda no quisieron dejar de estar en la protesta. El secretario general del PSPV, Ximo Puig, declaró que su partido no puede estar de acuerdo en unas medidas que se centran en recortar y no buscan formas de reactivación.
Por su parte, la portavoz de Esquerra Unida, Marga Sanz, lamentó que los ciudadanos tengan que pagar ahora «la factura de una mala gestión del PP».