Desahucio
«Cuca-plaga» en Orcasitas
Félix López es un vecino de 63 años que lleva toda su vida viviendo en el barrio de Orcasitas. Es propietario de una administración de Lotería que tuvo que blindar sus rendijas con cemento para ganarle la batalla a las cucarachas.
Estos pequeños e indeseables insectos aparecen todos los veranos en el barrio madrileño y los vecinos aseguran que este año son más gordas. Desde la Asociación de Vecinos de Orcasitas han organizado diferentes actos para reivindicar soluciones a este problema. «Entendemos que, en gran medida, se debe a la falta de limpieza en las calles y plazas del barrio. En concreto, zonas como la plaza de la Solidaridad o la plaza de las Asambleas apenas se barren. La contrata de limpieza es poco eficiente y están en un estado lamentable», explicó Eloy, presidente de la asociación. Según cuenta Félix, esta desagradable situación la viven «año tras año» y la medida que toman como particulares es «rociar con fuertes insecticidas las puertas de los portales, ya que a partir de las 21:30 horas, todas las cucarachas salen y pueden invadir las viviendas». «Nos hemos acostumbrado a tenerlas, pero aquí aún protestamos porque nos preocupamos por el escaparate del barrio», concluye. La Asociación de Vecinos amenaza con hacer una «Cucarachill-Out», una jornada festiva y reivindicativa en la que los vecinos salgan a cazar estos insectos para posteriormente llevarlos a la Junta Municipal de Usera, si la plaga no se erradica. Para ello, piden que se lleve a cabo el saneamiento de las zonas más afectadas y que el mantenimiento preventivo sea continuado. El Ayuntamiento de Madrid dispone de un dispositivo especial para el control de plagas que se denomina Unidad Técnica de Control de Vectores (UTCV). En ella, se tratan las plagas de forma preventiva: desde las palomas urbanas hasta las ratas, mosquitos, cucarachas o cualquier especie animal que suponga un peligro para la salud pública. Según explica el director jefe de la UTCV, José María Cámara, «la erradicación de una plaga es inviable, ya que el alcantarillado es un lugar muy aprovechable para las cucarachas, porque siempre buscan un refugio con comida, agua, etc.». El problema de estos insectos es que «cuando el invierno es duro, los animales entran en hibernación, pero cuando llega el buen tiempo, salen todos a la superficie y aprovechan esta época para reproducirse rápidamente».
Un invierno muy propicio
El invierno duro que ha pasado la ciudad madrileña, caracterizado por las lluvias hasta bien entrada la primavera, ha sido propicio para la aparición de estos insectos que se han convertido en una plaga para los vecinos de Orcasitas. Viven en el alcantarillado durante el año, y sólo salen cuando llega el buen tiempo para alimentarse y reproducirse rápidamente.
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