Comunidad de Madrid

Acuchilla a su madre por la espalda

José, de 29 años, apuñaló ayer a su progenitora, de 59, tras una discusión en su vivienda de Latina. El homicida, que tiene antecedentes, trató de simular un robo antes de confesar el crimen confesó el crimen, tiene antecedentes y problemas mentales.

Acuchilla a su madre por la espalda
Acuchilla a su madre por la espaldalarazon

MADRID- José quiso simular que habían entrado a robar a su madre y que, de paso, la habían matado. Parece que fue a esa idea a la que le dio vueltas durante los cerca de 30 minutos que permaneció solo, en casa, y con el cuerpo de su madre, ya sin vida, tendido en el suelo en medio de un gran charco de sangre tras haberla matado a puñaladas. Ni siquiera los cortes que él mismo tenía en la mano derecha le hicieron entrar en razón y darse cuenta de que esa teoría sería rápidamente desmontada por la Policía. Con esas, llamó al número de teléfono 091 sobre la 1:30 de la madrugada, aunque los vecinos habían escuchado gritos como 45 minutos antes. José Agustín Martínez de Tejada Fernández, de 29 años y que cuenta con un antecedente policial por un delito distinto al robo con fuerza, según una portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, explicó a los agentes que había llegado a su casa y que se había encontrado a su madre tirada en el suelo y toda la casa revuelta.

Los agentes se personaron en el domicilio rápidamente, al igual que los servicios de Emergencias de la Comunidad de Madrid. La patrulla y la ambulancia aparcaron en el número 16 de la calle Hilario Sangrador, en el distrito de Latina. El suceso ocurrió en el segundo piso.
Allí estaba el cuerpo inerte de Clara Fernández Moya, de 59 años, por lo que los sanitarios del Summa sólo pudieron certificar la muerte de la señora y comprobaron que tenía multitud de heridas por arma blanca. José Agustín se ensañó con su madre por la espalda, según la investigación. El Summa también atendió a su hijo con cortes superficiales en la mano derecha que, al parecer, se había hecho al apuñalar con saña y por la espalda a quien le dio la vida.

Y es que el joven confesó, tras le primer interrogatorio de la Policía, que había sido él mismo quien había acabado con su madre minutos atrás. El hombre fue detenido en ese momento por los agentes, que le trasladadron a dependencias policiales para un interrogatorio más exahustivo y su posterior puesta a disposición del juez, quien, con toda probabilidad, ordenará su ingreso en prisión al tratarse de un homicida confeso.

También llegaron al lugar los agentes de la Policía Científica,que realizaron la inspección ocular del domicilio de la tragedia y los agentes del Grupo VI de Homicidios, que se han hecho cargo de la investigación al estar esta semana de guardia. El cuerpo de Clara fue trasladado al Anatómico Forense para practicarle la autopsia.

Según fuentes polciales, existen informes médicos que acreditarían que el joven ha tenido algún problema de inestabilidad mental. No obstante, según señalaron los vecinos del vecindario a la agencia Efe, era frecuente escucharles discutir por temas de dinero. Uno de los inquilinos de Hilario Sangrador 16, que no quiso dar su nombre, aseguró que el joven es un guardia jurado en paro que siempre pedía dinero a su madre para sus gastos.

Otro de los vecinos, Ignacio García, apuntó que el joven frecuentaba un gimnasio cercano donde práctica boxeo, pero nunca fue problemático en la finca.

Por su parte, la fallecida, Clara, vivía en el edificio desde hacía mucho tiempo y mantenía una buena relación con el resto de los inquilinos de la finca. Trabajaba como auxiliar administrativo en los servicios tributarios del Ayuntamiento de Madrid, en el centro de la ciudad, según han comentado los vecinos y confirmado el Consistorio. Consuelo, del primer piso, señaló que el joven podría sufrir algún tipo de problema personal debido a la separación de sus padres.

Durante la tarde de ayer, agentes de Homicidios volvieron al edificio del crimen para continuar haciendo gestiones y recabando más datos entre los vecinos. También buscaban los agentes ayer por la tarde en el jardín situado frente al número 16 el arma homicida que, por el momento, no ha aparecido, y otras pruebas que pudieran ser relevantes para la causa. Aunque el móvil del homicidio no está muy claro y podría tratarse de una cuestión económica, el caso parece que no presenta mayor dificultad al haber confesado el joven su autoría.