Ponce afirma que el rabo cortado en Quito le permite «entrar en la Historia de esta plaza»

 Un día después de su rotundo triunfo en la Feria de Quito, Enrique Ponce se mostró exultante por el rabo cortado ante un toro al que incluso se pidió el indulto, un triunfo que calificó de «bonito», ya que considera que le permite «formar parte de la Historia de esta plaza».

«He tenido grandes tardes en esta plaza, lo demuestran los tres trofeos Jesús del Gran Poder que he logrado, y he indultado dos toros, pero nunca había cortado el rabo a uno matándolo, de hecho hacía 31 años que no se cortaba uno en Quito, eso lo dice todo», comentó Ponce sobre su gesta. No en vano, el último trofeo de estas características logrado en el coso ecuatoriano obliga a remontarse a 1979, momento en el que lo logró El Niño de la Capea.

Al tratarse de una corrida televisada en España, Ponce valoró que el triunfo haya traspasado fronteras: "Ha tenido un eco tremendo en toda América y también en España porque fue televisada por la autonómica andaluza, se trata de una feria con 50 años de historia que tiene gran repercusión y todo el mundo se ha enterado de lo que ha pasado, me hace especial ilusión que en España se haya visto la faena en directo".

Sobre la faena, el valenciano destacó que, pese al resultado final, «el toro no fue fácil». «Hubo que ir haciéndole, porque al principio era reservón, le di muy buenos tiempos y toques precisos, tapado, así logré que en cada muletazo hubiera una entrega total, llegué a abandonarme por completo», recordó el diestro de Chiva.

Una entrega tan alta que el tendido incluso pidió el indulto. Una cuestión sobre la que Ponce se mojó al afirmar que «no era toro para ello». «Es algo que aquí es frecuente, pero al final el astado se rajó, uno como torero tiene que atender a esa petición y darle una oportunidad al animal, aunque creo que no era de indulto», finalizó el diestro español, que volverá a actuar mañana en el coso de Quito con motivo de un festival.