Berlín

G-20 + BCE = volatilidad

La Razón
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- ¿Qué señales lanzaron el G-20 y el Banco Central Europeo?
Los ministros de Economía del G-20 emitieron un comunicado en el que se comprometían a dar «una respuesta conjunta y decidida a los nuevos desafíos que afronta la economía mundial» y a «tomar todas las medidas necesarias para preservar la estabilidad del sistema bancario y de los mercados financieros». Aseguraron asimismo que «harán todo lo posible para que los bancos tengan los niveles de capital adecuados». Por su parte, el consejero del BCE, el belga Luc Coene, admitió en una entrevista que, si los datos del mes próximo «muestran que las cosas están peor de lo que preveíamos, deberemos buscar qué tipo de decisiones podemos tomar para hacerles frente».

- ¿Cómo reaccionaron los mercados ayer?
Después de la sesión «tórrida» del jueves, en palabras del «Financial Times», donde las bolsas de todo el mundo desarrollado cayeron entre el 4 y el 5%, ayer viernes los mercados primero subieron, después bajaron y después subieron, con una tónica general mejor que el día anterior, y relativamente mejor en España que en otras bolsas europeas, como Londres, Berlín o París, que subieron por debajo del 1%. El Dow Jones repitió dicho perfil oscilante, pero también más tonificado que el jueves.

- ¿Tiene lógica esta volatilidad?
La relativa mejor jornada de ayer tiene todas las características de un efecto rebote, como se vio en las subidas de los bancos, que se derrumbaron dramáticamente el jueves, recuperándose en general el viernes.

- ¿La reacción de las autoridades brinda alguna dirección futura al mercado?
No. Aunque ayer, como dijo el «Wall Street Journal», pareció que entre tanta volatilidad «los mercados conceden a los políticos el beneficio de la duda», lo que prevalece es la duda, en un doble sentido. Por un lado, las señales de que la débil recuperación en marcha desde mediados de 2009 puede detenerse no han desaparecido, ni mucho menos.
Por otro lado, no está claro qué van a hacer las autoridades, y no se olvide que los gobernantes que aseguran en declaraciones pomposas y huecas que nos salvarán la vida son los responsables de nuestros males, los que con su intervencionismo inflaron primero la burbuja y después siguieron una política expansiva en los ámbitos monetario y fiscal que nos ha conducido a la parálisis actual.