Mutua madrileña un «plan azul» muy verde

Iniciativas tan simples como utilizar secadoras en vez de papel para secarse las manos, o proyectos tan costosos como la inversión de 24 millones de euros para la adecuación técnica de todos los edificios de la compañía son algunas de las líneas del proyecto de compromiso medioambiental de Mutua Madrileña.

El plan, bautizado como «Programa Azul», prevé recoger sus primeros frutos este año con la reducción de 500 toneladas de emisiones de CO2. Para ello, emprenderá una serie de medidas que, implementadas durante los próximos años, girarán en torno a cuatro ejes fundamentales. El primero de ellos, ya puesto en marcha, hace referencia a un concepto suficientemente conocido: el reciclaje. En este aspecto la empresa aportará un nuevo granito de arena con su sistema «vertido cero». Mediante el mismo, pretende garantizar el reciclaje de todos los residuos generados, controlando su trazabilidad y certificando que los orgánicos se tratan en plantas de biometización y compostaje.

El segundo que se materializa en la reducción del consumo energético y de agua en más de un 15 por ciento, contemplará, entre otros, el diseño de un proyecto de utilización de agua regenerada para el riego de jardines, la planificación de días de riego mediante predicción metereológica vía SMS del Canal de Isabel II, la introducción de detectores crepusculares en los aseos para que las luces se enciendan automáticamente al reducirse la luz natural. Asimismo, otra de las propuestas se basan en el sistema «free-cooling» para la climatización mediante aire exterior en épocas de temperaturas no extremas, o en controladores estáticos y módulos de inteligencia artificial en ascensores, con sistemas para aprovechar la energía de los propios procesos de frenado.Para todos sus edificiosUno de los aspectos más significativos de este plan es que, como ha explicado Lorenzo Cooklin, director de Comunicación y Responsabilidad Social Corporativa, «esto supone un paso de gigante, ya que antes se cumplía la legalidad y se hacían actividades esporádicas de concienciación y ahora se ha introducido un programa extenso, con diferentes iniciativas que involucran a toda la organización, incluidos los inmuebles que Mutua Madrileña tiene arrendados». De hecho, el tercer pilar del proyecto es extender a todos los edificios la filosofía y los medios técnicos para el ahorro energético y asegurar que el reciclaje se cumple. Y muestra de ello es la Torre de Cristal, primer edificio español en alcanzar la certificación de eficiencia energética A.

Finalmente, el cuarto eje se centra en involucrar también a sus clientes. En este sentido, la empresa ha elaborado una guía informativa sobre cómo reducir el consumo de combustible, seleccionando el momento adecuado para arrancar el vehículo, cambiar de marcha o decelerar.