«La ley antitabaco es un atraco»

Bajo el lema «Esta ley antitabaco nos arruina», un millar de empresarios del sector de la hostelería y la restauración recorrieron ayer por la tarde las calles del centro de la capital española, protestando contra la polémica norma y pidiendo una mesa de diálogo con las autoridades que permite una flexibilización de la ley, en línea con la mayor parte de los países europeos.

La concentración, convocada por la plataforma Libertad sin humo, reunió a representantes de la hostelería venidos de todo el país, que marcharon desde la plaza de Cibeles hasta la Puerta del Sol en medio de un ambiente totalmente festivo y desenfadado, al estilo del Love Parade berlinés. Acompañados por tres autobuses descubiertos adornados con globos de colores, los manifestantes avanzaban lentamente al ritmo de Shakira o de Juanes. Más que una manifestación de protesta, que también lo era, se trataba de una cabalgata lúdica a la par que reivindicativa. Gogos y dj's ponían un toque especial a una marcha «distinta y mucho más atractiva» que las manifestaciones convencionales.

Coincidiendo con la «alegre» protesta de los hosteleros, el comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT), contraatacó ayer por la mañana negando el impacto negativo de la ley antitabaco en el sector, hecho que no tardó en ser contestado por los asistentes a la manifestación, en medio de la particular guerra de cifras que defensores y detractores de la norma mantienen desde el pasado 2 de enero.

«Debe de ser que estamos aquí manifestándonos por afición, por que nos gusta dejar desatendidos nuestros negocios», ironizó José Luis Guerra, adjunto a la presidencia de la Federación Española de Hostelería y Restauración (FEHR), y una de las principales organizaciones asistentes. Guerra hizo especial hincapié en los últimos datos revelados por la Encuesta de Población Activa (EPA), que revelan una pérdida de empleo en el sector de la restauración de 53.200 puestos de trabajo durante los tres primeros meses del año, y coincidiendo justamente con la entrada en vigor de la ley antitabaco.

Asimismo, lamentó que la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, no escuche a los hosteleros en sus reivindicaciones. «Pajín está callada y no responde a nuestras cartas», señaló el dirigente de la FEHR, que afirmó que el CNPT, que niega las pérdidas de la hostelería, «habla por boca del Gobierno y dice lo que éste no se atreve a decir».

La hostelería votará en mayo
Una de las consignas más empleadas por los manifestantes fue la referida a las próximas elecciones municipales y autonómicas que se celebrarán el 22 de mayo en buena parte de España. El presidente de la FEHR, José María Rubio, explicó que han decidido concentrarse en época electoral «para expresar su rechazo a una ley que nos está causando graves pérdidas y para que los partidos políticos escuchen sus reivindicaciones».

Rubio cargó contra el Ejecutivo y le reprochó que haga creer a los españoles que el sector no está sufriendo pérdidas económicas. «Cuando hay partidos políticos que nos atacan, lo menos que podemos hacer es defendernos. No puede salirle gratis a quienes nos están arruinando. Ellos votaron en el Parlamento y ahora nos toca votar a nosotros, y se lo vamos a agradecer», señaló en tono irónico en alusión a las elecciones del 22-M.

Junto a los hosteleros también se concentraron asociaciones vinculadas al ocio nocturno y al juego, especialmente los bingos. El presidente de la Confederación Española de Organizaciones de Empresarios del Juego del Bingo, Fernando Henar, calificó la situación que viven de «dramática» y denunció unas pérdidas de hasta el 30 por ciento por culpa de la ley. «Si todo sigue igual, este año se perderán 5.000 empleos en el sector del juego», advirtió.

Europa da marcha atrás
Los hosteleros son conscientes de que los días en los que se podía fumar en cualquier parte de los bares y restaurantes han pasado a la historia y no volverán, ni lo pretenden. Lo que realmente quieren es una modificación de la ley antitabaco que permita su flexibilización, en línea con la mayor parte de países de la Unión Europea. De hecho, los convocantes de la manifestación afirman que «durante los últimos dos años, hasta diez países europeos han modificado y suavizado sus leyes antitabaco, o impedido iniciativas legislativas prohibicionistas». Alemania, Grecia, Holanda, Macedonia, Croacia, Bélgica, Bulgaria, Eslovaquia, Polonia y República Checa así lo han hecho.