El Rey aparece con un ojo morado por un accidente

MADRID- Su Majestad el Rey recibió ayer las cartas credenciales de los nuevos embajadores de Sudán, Malasia, Bélgica, India y Chipre en el Palacio Real. Algo habitual y generalmente poco noticioso. Pero Don Juan Carlos apareció ante los nuevos embajadores con una tirita en la nariz y un ojo morado, lo que inevitablemente generó todo tipo de comentarios. La Casa del Rey se apresuró a aclarar que esas lesiones en el rostro se habían producido cuando el Monarca se disponía a abandonar una habitación en el Palacio de la Zarzuela y desde el otro lado de la puerta alguien abrió ésta y el filo de la misma golpeó en su rostro, amoratando su ojo y provocándole una pequeña herida en la nariz.

Las mismas fuentes aclararon que se trataba de una lesión «sin importancia» fruto de un «accidente doméstico» que no ha afectado a la visión y ni siquiera precisó de más atención que una tirita en la herida de la nariz.

De hecho, Don Juan Carlos siguió con su agenda prevista con total normalidad. Además de recibir a los nuevos embajadores presidió por la tarde la entrega de los premios del Fondo para la Protección de la Naturaleza. El Rey acudió a este acto con unas gafas de sol que tapaban el moratón de su ojo izquierdo, principalmente por una cuestión de estética, dado el color que tomaba éste con el paso de las horas. La Casa del Rey no quiso dar más importancia al accidente.

Otros percances
- Desde que tropezara en Atenas antes de su boda (un percance que casi le obligó a casarse con el brazo izquierdo en cabestrillo), el Rey ha tenido varios accidentes que le han llevado a pasar por el quirófano.
- Don Juan Carlos ha sufrido la mayoría de sus lesiones practicando alguno de sus deportes favoritos. En los 80 se golpeó con una puerta de cristal tras jugar al squash con Santana y a lo largo de su vida ha sido operado varias veces tras sufrir diversos accidentes esquiando. También se lesionó un ojo en una jornada de caza.