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OPINIÓN: Contra Alemania lagarto lagarto

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OPINIÓN: Contra Alemania lagarto lagartolarazon

Martes, 29: Di María«Cracks», marca, chequera: esto es el Real Madrid. Florentino Pérez ha fichado al argentino Javier Di María, 22 años, mozalbete «de mucho futuro». Como atestigua la historia, los «di» se le dan al Real Madrid de cine 3D. Con don Alfredo Di Stéfano (¿por qué se ennoblece a los ban- queros, empresarios y cientificos egregios y no a los egregios del deporte? Inglaterra, con su Sir, es más democrática y generosa que España), con Di Stéfano, decía, digo, el Madrid fue a las competiciones europeas lo que la selecciones de Brasil, Alemania y otras a los Mundiales: la reoca en copas y la reoca en títulos. Es de esperar que Di María emule glo- riosamente a don Alfredo, y es de desear que el «crack» Di María no le salga a Florentino tan «falli- do» como los «fallidos» Robinho, Sneijder y Robben. ¿Qué «malaje» tendrá el Madrid de FP que «desface» a quienes, comprados a precio de diamantes y vendidos poco menos que a coste de saldo, triunfan en el Mundial? Miércoles, 30: Villa«Villa España» y «Maravilla», que tanto monta. Hasta la BBC, tan oxfordiana y ortodoxamente ta- caña en el elogio, dice maravillas de Villa. El gol de Marcelino y los goles de Villa. Hay goles que his- torifican. Ni Messi, ni Cristiano, ni el toro Rooney. El Robin Hood del Mundial es Villa, el «bajito» y pimpante. Qué gozo para el Bar- ça, máxime porque Villa y Xavi, un sabio alimentador, se llevan como González y Guerra en sus años de oro y miel. Jueves, 1: perdónLa dulce Inglaterra es la madre de los parlamentos y el padre del fútbol. La FIFA, de hecho, espiritualmente, ha sido siempre una colonia británica. Joseph Blatter, el actual presidente, 76 años, es suizo, pero más conservador que la monarquía británica. A los 76 años, por cierto, hay que ser conservador de la misma manera que a los 20 hay que ser audaz y rebelde. El señor Blatter ha pe- dido perdón por los «eliminadores» errores de dos árbitros: uno «se cargó» a Inglaterra y el otro validó un gol en fuera de juego de Argentina. La FIFA debe adaptarse a la vivaz y tecnológica sociedad del siglo XXI. Cerrar los ojos al progreso es propio de ce- rebros senectos y jibarizados. «Ojo de Halcón» ya.Viernes, 2: EspañasLa España de Del Bosque y la España de ZP. En la España de Vicente Del Bosque españolean gloriosamente siete catalanes, tres madrileños, tres andaluces, dos castellanos-leoneses, dos canarios, dos navarros, un vasco, un valenciano, un asturiano y un castellano-manchego: 23 españoles. ¿Qué es lo que segrega esa España de Del Bosque? Solidaridad, convivencia en armonía, amor a España. Sintetiza ese nirvana en frase formidable el no menos formidable Fernando Llorente: «¿Torres o yo? España. Lo importante es España,no él o yo». La triste España del ínclito ZP: paro, miedo al futuro, corrupción, crisis económica sin horizonte de mejora, desarmonía, Cataluña (no el pueblo catalán, que es fantástico, ojo, sino sus enanetes y «foráneos» políticos) siempre amenazando con la zarpa del independentismo, una Constitución obsoleta y ca- da vez más «puteada». –¡Viva España hasta la final y en la final, si llega, gane o pierda, viva España!– en la televisión,un «rojelio» bastante «rojo». Lo de la España de ZP y la España de Del Bosque no es invento mío, es tema que está en la calle y no exactamente como brote verde. Yo la «cazé» en el Metro.Sábado, 3: miedoAl borde del infarto: eso fue el España-Paraguay. Yo creo en la España de Del Bosque, pero la Alemania de la señora Merkel, tan joven, tan audaz, tan brava, tan lozana, tan veloz..., me da un poco de miedo. Contra ella, España tendrá que ofrecer un recital de sus excelencias para que la señora Merkel no nos apriete también las tuercas en fútbol.