Tarrés acusa y demanda

Madrid- Estaba cantado y escrito, Anna Tarrés ha interpuesto una demanda contra Fernando Carpena, presidente de la Real Federación Española de Natación, a quien considera brazo ejecutor o, por lo menos, ideólogo de la carta que firmaron 16 ex nadadoras que denunciaban «mobbing», trato vejatorio, abuso de poder u ocultación de un positivo por parte de la todavía seleccionadora española de natación sincronizada, sólo unos días después de anunciar que no renovarían su contrato y horas antes de presentar al equipo técnico sucesor.

Extrañó sobremanera a Tarrés que con un Mundial de Natación en Barcelona, su ciudad, Carpena la despidiera. No encontraba explicación plausible al asunto, si bien sus relaciones con el presidente federativo eran bastante más tirantes que fluidas y trufadas de enfrentamientos. Pero como se conseguían resultados... Sin embargo, su extrañeza, compartida por la mayor parte de los aficionados, fue contestada en una carta que la dejaba a los pies de los caballos la víspera de la presentación de sus sucesoras. Investigó, ató cabos, concluyó que el presidente estaba detrás de la misiva y el lunes presentó una demanda contra él. En una entrevista concedida a la agencia Efe, explica las razones de la denuncia: «Por atentar contra mis derechos fundamentales, contra mi imagen, mi honor, mi dignidad, mi persona. Creo que se ha orquestado toda una campaña de descrédito y tengo que defenderme».

No duda del protagonismo estelar de Carpena en todo este asunto: «Está detrás de todos y cada uno de los movimientos que están detrás de esta carta, porque esta carta surge el día antes de la presentación del nuevo equipo técnico. Durante todos los años que he estado trabajando en la Federación, se ha recibido una carta dentro del mandato del señor Carpena, donde tres de las nadadoras, que justamente también firman esta carta (Paola Tirados, Cristina Violán y Laura López) se quejan de una serie de cosas, pero a mí nunca se me hizo pública la carta; se me dice, pero allí queda y el señor Carpena la archiva. Que salga esta carta ahora (...) me parece una serie de casualidades muy sospechosas».

Algunas ex nadadoras la han acusado; otras la apoyan: «Andrea (Fuentes) tuvo una reacción inmediata ante la situación, cosa que le agradezco mucho, y Gemma (Mengual) dijo públicamente que esto no tenía nada que ver con ella. Se lo agradezco muchísimo, porque está en una situación muy difícil, porque se encuentra en el otro lado. Ona Carbonell me llamó desde el Himalaya para decirme que está conmigo».