Higuaín no descansa

En la primera Mourinho dio el brazalete a Sergio Ramos y lo acompañó de Albiol, Di María, Benzema y suplentes de profesión en el nuevo Real Madrid. Con los dos Diarra en el centro del campo, el Madrid era un adversario inofensivo para el Galaxy, al que no quería incomodar en su casa y en el partido homenaje para Clint Mathis, un clásico del equipo californiano y de su selección que se retira. Y llegó al descanso con dos goles de desventaja, uno después de mil rebotes y otro del capitán, Landon Donovan.

Pero en el Real Madrid no hay amistosos. Lo dicen los clásicos que se criaron con aquel equipo de Di Stéfano y Santiago Bernabéu. Y lo piensa Mourinho. Es una cuestión de respeto, para el rival y para el espectador. La mejor manera de respetar al anfitrión es disputarle el triunfo y eso hizo desde el primer minuto de la segunda parte. Cuando salieron «los buenos». Tan en serio se lo tomaron que a Casillas no se le vio en los 45 minutos que jugó.

Xabi Alonso tomó el mando en el centro del campo. Juega en corto y en largo, pero le divierte más un pase a distancia. Y a sus compañeros también, especialmente a Cristiano y a Higuaín, que así encuentran una excusa para correr.

El partido se trasladó al área contraria, con la intensidad que exige Mourinho. Las ocasiones se multiplicaban. Las de Higuaín especialmente. El argentino no descansa y marcó los dos primeros goles de su equipo, los que daban el empate. El segundo, espectacular, después de un regate en el área sin moverse de su sitio y un gran golpeo con el exterior a la escuadra contraria.

Las ganas de unos, además, contagian a los otros. Ya no es Cristiano el que tiene que tirar de sus compañeros. La envidia le puede al portugués, que es incapaz de quedarse tan tranquilo viendo cómo su compañero marca dos goles. Él también quiere los suyos y los buscó. En jugada o con la pelota parada, pero se le escapó. Fue Pedro León el que marcó el tanto definitivo, el de la victoria.

El Madrid gana y, además, no tiene pinta de aburrido.

Mourinho insiste en Maicon
«Necesitamos un defensa que sepa atacar», asegura Mourinho. Y no puede ser Ashley Cole «porque el Chelsea no le dejará salir». Lo dice el portugués en una entrevista con el «Sunday Telegraph». Es su manera de pedir a Florentino Pérez que haga un esfuerzo por Maicon. Un discurso en el que insiste en los últimos días, aunque sin nombrar al futbolista brasileño. Mourinho quiere a Maicon, pero se preocupa por elogiar a sus futbolistas. «Higuaín es un delantero ‘‘top''», afirma. Pero también se acuerda de Benzema. «Jugamos tres competiciones y no podemos depender todo el año de Cristiano y de Higuaín. Benzema es importante», asegura. «Me gustó cómo hemos jugado en defensa, cómo hemos presionado, cómo hemos jugado el balón y cómo hemos sabido hacer gol», añadió.